Libro de Hebreos 12:28-29: “Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor.” El título del mensaje es el servicio aceptable a Dios. Dice el versículo 28 que “Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia” Prestemos atención a la palabra ‘agrandándole; quiere decir que el servicio a Dios tiene que ser un servicio que le es agradable. Un servicio aceptable a Dios es el título del mensaje. Dios quiere que le sirvamos, obviamente lo demanda, él pide, pero también demanda que el servicio a Dios sea aceptable, que sea eficiente, que le sea agradable. Nuestro mejor servicio es lo que deberíamos de darle a Dios. Muchas veces le servimos a Dios, pero no le damos lo mejor, servimos a Él, pero no nos aseguramos que el servicio que hacemos a Él sea aceptable a Dios. Muchas veces cometemos ese error; tienes que servir, pero, ¿cómo le estamos sirviendo? alguien dijo ‘no importa que sirva o no”. Sí importa porque Dios quiere que sea agradable, Dios quiere que sea aceptable, entonces Dios quiere que sí le sirvamos. Necesita lo mejor de nosotros, mejor mensaje, mejor oración, mejor testimonio, mejor vida, mejor esfuerzo físico, mejor esfuerzo en todo lo que hacemos. Pero ¿sabes qué? tenemos que asegurarnos que sea acepto y agradable a Dios.

Su servidor tiene 32 años de ser salvo, desde que fui salvo empecé a servir al Señor en la iglesia local, pero a los 2 años de ser salvo, comencé a servir como asistente de pastor, hace 30 años. ¡Qué duro sería que después de tanto tiempo encontrarme que mi servicio a Dios no fue aceptable, que no le fue agradable!; usted dirá “pastor, pero no lo tomaría en cuenta”, bueno, eso Él lo va a decidir. A lo que quiero llegar es que yo tengo que asegurarme que mi servicio es aceptable y agradable a Dios, ¿por qué? porque no quiero que cuando llegue a su presencia Él me diga “me serviste, pero estabas mal”. Tengamos cuidado en cómo le servimos, los motivos por los cuales le servimos, ¿qué es lo que logramos alcanzar para nosotros, por una reputación? o ¿lo hacemos para la gloria de Dios para que él sea glorificado, para que almas sean salvas, para que el reino de Dios sea engrandecido? Pero hay una cosita que encontré en la Biblia que puedo por lo menos tomar en cuenta al servir a Señor para que mi servicio sea agradable a él.

Lo primero que yo veo aquí, es que un servicio aceptable significa un servicio exclusivo. No se puede servir a dos señores, tienes que decidir qué vas a servir solamente a Dios. Yo entiendo que tenemos trabajo secular y entiendo que tenemos otras cosas que hacer. Pero, ¿sabe qué? todo debe ser como parte de un todo y el todo es servir a Cristo. El trabajo secular lo tengo para mantenerme mientras sirvo a Cristo, porque Él debe ser lo primero en mi vida, debo dejar todo lo demás por un lado para seguir y servir solamente al Señor Jesucristo.

Vean lo que dice Mateo 6:24 : “Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.” Lo que quiero que entienda bien desde el principio del versículo, es que no se puede servir a 2 señores. Decida que va a servir solamente al Señor, y cuando yo digo eso, digo que va a vivir solamente para Él, que Él va a ser primero, segundo y tercero, que Él va a ser el todo para usted, que su vida no sea más que solamente para agradarle a Él, para servirle a Él en todo lo que haga, si va a estudiar: para el Señor, si va a trabajar para: el Señor si va a abrir un negocio: para el Señor, si va a ganar almas: para el Señor, si va a venir a la iglesia, todo para el Señor. Él merece lo mejor y no puede servir a dos señores, porque vas a agradar a uno y vas a menospreciar al otro.

Ahora, para nosotros los pastores, nos aseguramos que estamos sirviendo solamente a Cristo, a mí me han ofrecido montón de trabajos, me han ofrecido vender seguros, hacer esto o aquello, pero cuando se dan cuenta que pastoreo una iglesia grande me dicen “pastor, mire usted me ayuda y usted vende y le vende a los hermanos y pone a otros a vender y le voy a dar diezmos a su iglesia” Yo les digo enérgicamente que yo solo trabajo para Dios. ¿Sabes qué me dicen aquellos que me han ofrecido trabajo?: “no, yo también tengo pastores que trabajan para mí”; digo que lo siento mucho porque yo no voy a trabajar para un hombre, yo trabajo sólo para Dios. Yo entiendo que cuando estás comenzando la obra a veces tienes que trabajar secular para mantenerte y no vas a estar esperanzado. Pero, ya han pasado tantos años y por eso no puedes levantar la iglesia para que sostenga, porque no te has aventado tiempo completo, estás teniendo otro trabajo más la iglesia y aquello y lo otro. ¿Por qué no te avientas sólo a trabajar para el Señor?; y si lo haces pon un tiempo y di que solamente un tiempo vas a trabajar secular mientras levantas la obra, pero que vas a trabajar tan fuerte para poder levantar un siguiente grupo para que me sostenga, para poder dedicarme 100 % a la obra de Dios.

Un servicio aceptable es un servicio exclusivo también es un servicio sin pecados. Vean Romanos 6 :6; lo primero es que no se puede servir a dos señores, solamente a Él, segundo, dentro del servicio exclusivo no debe haber pecado: debe ser sin pecado. Romanos 6 :6 dice “sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. ” Mire yo he vivido suficiente y he sido cristiano suficiente, para darme cuenta que algunos se envuelven más en la iglesia y empiezan a hacer más cosas y a obtener más resultados para encubrir un pecado. Creemos que porque estamos dando resultados, porque estamos sirviendo, Dios nos va a perdonar este pecado. ¡No!, tú no puedes escudar tu pecado y ponerte a trabajar más para de alguna manera satisfacer a Dios y que Dios diga “está bien, yo sé que estás en pecado, pero al cabo que me estás sirviendo”. ¡No!, sírvele al Señor exclusivamente y sin pecado, dedíquese total y completamente a Él, su vida, su cuerpo, su mente, su espíritu, todo déselo al Señor diga “Señor todo lo que está en mi mente y en este cuerpo es para ti”. No puedes servir a 2 señores. Es lo que está pasando hoy en día, tenemos el corazón dividido entre esto y aquello, no debe ser así, el corazón debe ser 100% entregado al Señor.

Un servicio aceptable es un servicio exclusivo, un servicio aceptable es un servicio hecho con el sentido del deber. Muchos no tienen compromiso, es más creemos que si servimos a Dios y sí servimos en la iglesia local le estamos haciendo un favor a la iglesia y no es así. Debemos de servir a Dios con un sentir de obligación, con un sentir del deber. Tengo que hacerlo porque mi Señor merece todo lo mejor de mí; ¿sabes por qué? porque no somos nuestros, le pertenecemos a Cristo. Vea Primera de Corintios 6: 19 – 20 “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” Son de Él, su cuerpo, su espíritu son de Cristo. Algunos dicen “mi espíritu es de Él”, no olvides que tu cuerpo también es de Él. Tienes que usarlo para gloria de su nombre, tienes que usarlo para su servicio. No te perteneces a ti, le perteneces a Él, entonces sírvele con un sentir del deber. Es mi deber hacer, debo de hacerlo no porque me predican, no porque me lo piden, no porque hay una necesidad. Es que yo no me pertenezco a mí mismo, le pertenezco a él y si él quiere que le sirva le voy a servir a Él, y me voy a sentir obligado, comprometido, responsable a servir al Señor. Alguien dirá que soy exagerado, pero eso es lo que Dios quiere, si le quieres ser acepto si le quieres ser agradable, por supuesto eso implica que no tomamos a gloria para nosotros, la gloria es de Él.

Pero hay una tercera cosa, un servicio exclusivo, un servicio hecho con sentido del deber, un servicio privilegiado; es un privilegio servir a Dios, no es un derecho, es un privilegio. En las iglesias bautistas fundamentales no usamos esa terminología, pero hay grupos cristianos que usan esa terminología, en lugar de decir es un siervo o un obrero” dicen así: “tiene un privilegio”. Eso describe lo que es el servicio, porque en realidad ganar un alma o ser diácono o asistente o cantar en el coro es un privilegio, no es un favor que le estás haciendo a la iglesia. Es un privilegio que tú tienes de servir a Dios. En otras palabras que bueno que nadie más lo está haciendo, sino que yo tengo el privilegio de hacerlo. Imagínese toda una iglesia sirviendo así, una iglesia que sirve con gozo, una iglesia que agrada al Señor.

Hermanos pastores, es un privilegio servir al Señor. Yo no entiendo, yo encuentro pastores que están sirviendo en un lugar y gente que se queja diciendo que no está a gusto, y yo digo “¿para qué te fuiste?, ¡regrésate! y ve donde Dios te ha enviado y considéralo un privilegio. Si es un misionero, considera un privilegio igual que ser un pastor”. Un misionero me dijo” pastor Prada usted tiene que ayudarme económicamente, porque si usted no me ayuda entonces yo voy a tener que trabajar secular”; ¿sabes qué le contesté?: “adelante amigo, ya era tiempo que trabajaras”. Era como que era mi obligación, y no porque servir a Dios es un privilegio y si una iglesia te apoya es un privilegio, porque nadie está obligado. Y si nosotros vamos a dar la obra misionera, no es por obligación. También es un privilegio que podamos dar a la obra misionera.

Un servicio privilegiado: servir a Dios y a la humanidad y a los hermanos en la iglesia es un maravilloso privilegio. Cuánto tiempo 12 meses a o, 30 a días mes, 24 horas al día, 60 minutos a la hora, 60 segundos el minuto, año tras año y por toda la vida. “Pastor , sólo dijo eso y me cansó” piensas; no te canse del privilegio que tienes de servir a Dios, ¿cuántos renuncian al privilegio? se echan para atrás; “nadie me agradeció, nadie me reconoce, nadie me toma en cuenta” piensan. Es un privilegio servir a Dios, hazlo de corazón, con ganas para el Señor, hazlo con sentido del deber y un servicio privilegiado.

Hay más, hay que hacerlo sin temor, sin miedo, sin acobardarte. Vea algo interesante en Lucas 1, habla Zacarías de una profecía, él es el papá de Juan el bautista, en el versículo 67 dice “ Y Zacarías su padre fue lleno del Espíritu Santo, y profetizó, diciendo: ” y el versículo 72 -74 nos dice la profecía “Para hacer misericordia con nuestros padres, Y acordarse de su santo pacto; Del juramento que hizo a Abraham nuestro padre, Que nos había de conceder Que, librados de nuestros enemigos, Sin temor le serviríamos ” Tenemos este contexto. Sólo quiero esta partecita que dice que Dios libró al pueblo de Israel de sus enemigos con un propósito, ¿cuál era el propósito? que le sirvieran sin temor. Si yo tengo el privilegio de servir al Rey de reyes, al Señor de señores, le voy a servir sin temor, sin acobardarme, sin miedo, con ganas, osadamente, atrevidamente; ¿por qué? porque si él quiere que le sirva, yo trabajaré para Él, Él me va a financiar, ÉL me va a respaldar, Él me va a proteger, a cuidar, Él va a estar detrás de mi ministerio. Por eso me salvó, por eso me guarda, por eso me protege, por eso me cuida, para que yo me despreocupe de todo y le sirva a Él. ¿Quieres agradarle? sírvele exclusivamente, ¿quieres agradarle? sírvele con un sentido del deber, ¿quieres agradarle? considera un privilegio servir a Dios, ¿quieres agradarle? sin temor, no te acobardes. El Mayor es el que está con nosotros.

Por último: un servicio fiel. ¿Cuánta infidelidad hay hoy en día? Yo encuentro personas, yo he estado 24 años en la misma iglesia, salgo a dar la vuelta a la ciudad, voy de compras a algún lugar, a una tienda la que sea y me encuentro ex miembros. ¿Sabes qué es lo que me preguntan?: “pastor Parada, ¡ qué bueno verle! y ¿dónde está ahora?”, es porque han conocido montón de pastores que se camban de iglesia como cambiarse calcetines. “¿Dónde está ahora?” dicen, yo les contesto “no, estoy en el mismo lugar” y se quedan sorprendidos dicen “¡¿qué!? ¿¡todavía?!” –“sí- contesto gustoso- ¿qué creíste por qué tú fuiste infiel y te fuiste yo me iba a ir también?”. ¿Cuántos cristianos infieles? porque no se dan cuenta que no están sirviendo a la iglesia, ni al pastor, están sirviendo al Señor. Me encanta cuando voy a la iglesia y veo a un hermano ahí constantemente y pasan 10 años o 15 años y ahí sigue el hermano. Esos son hombres y mujeres fieles, pero ¡qué triste cuando va uno y no encuentra a ciertos hermanos que gritaban amén y dicen que ya no van!, triste que después de las conferencias se van. ¡Gloria a Dios por aquellos que son fieles en la obra de Dios!, que se hace con hombres y mujeres fieles.

Yo tengo una miembro que tiene 48 años de estar ahí, fue de las iniciadoras de la obra; cuando el pastor que inició la obra donde yo estoy, fueron 2 pastores los que han tenido la iglesia en 48 años. Él que inició predicó 24 años, yo llevo 24 años, ya estamos empatados. Y si Dios me lo permite, quiero predicar por 50 años ahí, morirme ahí y quedarme ahí. Pero esa miembro está ahí, tenemos una foto del grupo original, son 4 y el pastor estaba enseñándonos un estudio bíblico, ni era un auditorio, era un salón, estaban sentados y los 4 ahí recibiendo la Palabra de Dios. Esa hermana ahí está todavía, ahí estuvo el domingo pasado. Cada semana sin falta, presente en los servicios, dando su diezmo, dando a misiones, dando ofrendas especiales, 48 años de miembro. ¿Cómo la ven? pues fiel. Cuando yo llegué ahí hace 24 años con mi esposa, ella no estaba tan anciana como está hoy, salía a ganar almas con nosotros cada semana. Por eso es que vemos iglesias que florecen, iglesias que avanzan, porque hay miembros que le sirven a Dios agradándole fielmente. Váyase de la iglesia cuando se muera, cuando lo saquen en una caja, no importa si lo regañan, lo ofenden, lo chismean de usted, o lo vean mal a usted, no importa, no se vaya, sea fiel al Señor. Dije sea fiel al Señor, espero diga amén. Usted dirá “pastor, eso es muy extremo” le voy a decir lo que Dios espera de usted, vaya a Apocalipsis 2:10; si a usted le parece extremo lo que yo dije vea lo que Dios requiere de cada uno de nosotros; Apocalipsis 2 :10 “No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.” Por si no te ha quedado claro, si no eres fiel te va a ir muy mal.; ¿qué dice después? que si somos fieles y Dios no dará la corona de la vida. Eso sí es extremo. No está hablando de que seas fiel hasta que te mueras, está diciendo que seas fiel aunque te cueste la vida y tengas que morirte.

Ayer hablaba con los hermanos de la Sierra Negra, ahí amenazan con quemar, ¿cuántos de nosotros ya nos hubiéramos rajado? yo por eso no voy allá, que el hermano vaya allá, pero tenemos en el día de hoy hombres y mujeres dispuestos a dar su vida, literalmente, por Cristo. Yo tengo que admirar algo así, porque yo me rajó asta porque me miran mal o porque me mencionaron a la mamá, o porque me tiraron una puerta, es más, yo me rajo porque ¡alguien me miro mal! -“¿y por qué no vas a la iglesia?” preguntan algunos a ciertos hermanos, y otros contestan “no es que el pastor dio un anuncio y creo que se estaba refiriendo a mí” Ese es tu delirio de persecución, no la realidad. “Es que yo estoy pagando el precio, yo no me voy hasta que termine el culto” dicen, yo me ‘sorprendo’, -” es más si es posible voy hasta 2 veces por mes”, dicen tontamente. Dios espera que estés dispuesto a dar la vida por Cristo, “sé fiel hasta la muerte y yo te daré la corona de vida” o sea, si algún día alguno de ustedes tiene el privilegio, o yo tengo el privilegio, de morir por Cristo, que ultimadamente si te matan te vas con el Señor. Nomás que si estás en un lugar donde te van a matar compra un seguro de vida.

Aquí dice el Señor que te va a dar una corona de vida, porque tú diste tu vida por Él, Él te va a dar una corona de vida allá en el cielo. En otras palabras, hay recompensa para aquel que es fiel, de tal manera que aguanta, sírvele, agrádale y yo digo que es un privilegio porque alguien me dijo a mí, un pastor en Guerrero, me dijo eso a mí. A él lo amarraron y lo iban a matar. Yo le pregunté “hermano, ¿qué se siente?” y ¿sabe qué me dijo? ” pastor una fortaleza inmensa, un gozo increíble”, yo no estaba mirando y diciendo que estaba loco. Él me dijo ” de un manera especial, si Dios te concede ese privilegio, Él te da de su gracia”. Ninguno de nosotros va, más bien la mayoría de nosotros no vamos a pasar tal experiencia. Vuelvo a repetir, la mayoría de nosotros no vamos a pasar tal experiencia, pero deberíamos estar dispuestos y por eso que no te rajes por cualquier cosita. No te rajes por cualquier cosita no seas rajón, no seas cobarde, no seas afeminado y no digo más porque voy a decir malas palabras.

Termino acá, un servicio aceptable es un servicio exclusivo, un servicio hecho con sentido del deber, un servicio privilegiado, un servicio sin temor, un servicio fiel. Por último un servicio a Dios. El servicio de Dios paga en la vida, paga en la muerte y paga en la eternidad, ¿qué estoy diciendo? vale la pena servir al Señor, si yo tuviera que comenzar otra vez y se me diera la oportunidad, aceptaría a Cristo antes de que lo hice, lo hice cuando tenía 20 años. Y si me preguntaran “¿servirías a Dios otra ves?” mil veces le serviría otra vez, porque vale la pena y cuando me muera, vale la pena haber servido a Cristo y cuando esté en la eternidad con Él habrá valido así la pena haber vivido para Cristo.

¿Por qué no le sirve al Señor? porque no como miembro le sirves al Señor, cada miembro debería tener un ministerio en la iglesia y si yo preguntará a cada uno, uno por uno, “¿cuál es tu ministerio? sin titubear cada uno debería contestarme “esto es lo que yo hago para el Señor”. No van a querer que pregunte, pero un día cuando llegues al cielo el Señor te va a preguntar ” ¿qué hiciste por mí?” qué le vas a contestar? espero que cada uno de ustedes regrese con una convicción de decir “voy a envolverme en la obra del Señor” que le agradezcas al pastor por las conferencias por animarte y que le digas en que le puedas ayudar. Pastor, ponlo pronto a ayudar y a servir, no lo mandes al seminario por 5 años antes de ponerlo a servir, que empiece a limpiar el templo, que empiece a ganar almas, que empiece a ser ungiere, que empiece a cantar en el coro. Y si no hay coro que se comience uno. No es tiempo de perder tiempo, es tiempo de echarle ganas, es tiempo de ponerse a trabajar y asegurarnos de que nuestro trabajo sea aceptable a Dios y agradable a Él.