Se de bendición a tu amigo

Proverbios 27:17

“Hierro con hierro se aguza;

Y así el hombre aguza el rostro de su amigo.”

¿Tu amistad hace mejor a tu amigo? ¿qué estás haciendo en la vida de tus amigos? ¿estas llevándolos a tomar buenas o malas decisiones? 

Los jóvenes no reciben dentro de casa la atención porque papá y mamá tienen la atención en el celular, en el fútbol, en la televisión, con los cuates, entonces los hijos cuando están en la secundaria encuentran la atención y esa atención no es positiva, esas amistades no son buenas. Como papá y mamá tienes que buscar que tus hijos puedan encontrar y tener buenos amigos. Eres responsable de la amistad de tus hijos, ¿alguna vez le has preguntado a tus hijos que quienes son sus amigos en la escuela y aun dentro de la iglesia? 

Cada uno de nosotros hemos tenido malas amistades y ellas nos han llevado a tomar malas decisiones. Es por eso que en el cristianismo cuando recibimos a Cristo una de las primeras cosas que debemos hacer es hablarles, decirles cuán grandes cosas ha hecho Dios con nosotros pero también apartarnos de las amistades que nos van a llevar, que nos van a arrastrar y a regresar a lo que hacíamos antes. La influencia de estas amistades va a ser más fuerte que la de la iglesia, porque apenas nos estamos conectando. Las malas amistades te van a llevar a sacarte de la iglesia y a dejar las cosas de Dios.

Hace años hicimos una visita y había un matrimonio. El esposo tenía tantas ganas de servir a Dios. Estaba tan contento que habían regresado a la iglesia, la esposa más porque veía que el esposo estaba cambiando pero cuando llegamos nos dijeron que se acababan de regresar a una colonia, y la esposa pidió oración por su esposo porque en esa colonia él tenía malas amistades, porque antes de que su esposo fuera policía vendía drogas con sus amigos. Hablamos con él y dijo que ellos iban a continuar e iban a seguir adelante. Un mes después dejaron de venir, tres meses después este hombre comenzó a meterse en serios problemas por las malas amistades que tenía.

Nosotros como buenos amigos debemos de aguzar (no abusar) afilar, a ser mejor, a procurar el bien, asegurarnos que nuestros amigos son mejores personas por nuestra causa. ¿Que estamos haciendo para ayudar a nuestros amigos? 

Una de las primeras cosas que debemos hacer en nuestras amistades si es que tenemos una amistad allá afuera es para salvación. No hay mejor filo, no hay mejor cosa que podamos hacer que hablarle a alguien de Cristo. Algunos que ya tenemos años en Cristo quizá todavía tenemos amistades que necesitan de Cristo, necesitamos orar por ellos.

Valdrá la pena buscar a alguien para que encuentre a Cristo. Como cristianos no podemos esperar para ayudar a un amigo pero lo que hacemos es que todo lo dejamos al final. Sabemos que debemos de afilar esas tijeras pero pensamos que no la vamos a necesitar pero va a haber un tiempo en que las vamos a necesitar. La salvación no la podemos dejar para el último, el hablarle a nuestros amigos de Cristo no lo podemos dejar para el final. Tenemos que hablarles y llevarlos a Cristo, tenemos que testificarles. 

Hace años una hermana me estaba platicando que su hija de 13 años tenía una amiga de la secundaria que se metía en muchos problemas y entonces me pregunto que qué hacía que si ya no dejaba que se juntara con ella. Yo le dije que yo veía que su hija estaba tratando de traerla a la iglesia y que si su hija era líder que ella no dejara que su amiga le dijera que hacer, sino al contrario. Gracias a Dios continuó trayendola, hablándole y siendo buena influencia, pero ¿qué hubiera pasado si le hubiera dicho que no? Hay esperanza de que nosotros podamos traerlos y hablarles, compartir con ellos lo que Cristo hizo por nosotros.

Rut 1:16 dice, “Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque a dondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.” Aquí está Rut que era nuera de Noemí. Rut sabía que podía ser buena influencia en la vida de su amiga que era su suegra. Rut le dijo que no la iba a dejar, que estaría con ella. Cuando ellas regresaron a Belén Rut no era alguien que abusaba sino que afilaba, no era una carga sino una bendición, no traía problemas sino trajo buenas cosas a la vida de Noemí. Ella pudo haber dicho, “en primer lugar tus dioses no son compatibles con los míos, usted fue una mala persona conmigo” pero Dios comenzó a hacer una obra en la vida de Rut y ella ayudó a su suegra. Rut comenzó a buscar trabajo y cuando llegaba a trabajar no llegaba a los campos de Booz, quejándose, arrastrando los pies, llegaba más temprano y salía más tarde que todos. Era una mujer trabajadora y nunca fue una carga para Noemí y a través de todo lo que hizo ella fue de bendición a Noemí. Nosotros podemos ser de mucha bendición.

Podemos ser de bendición para que ese amigo sea salvo. Si mi amigo ya es salvo lo que podemos hacer es buscar su santificación, en otras palabras que se acerque más a Cristo. Que mi amistad les pueda ayudar a ellos para que se acerquen más a Cristo. La santificación es algo que está apartado para el servicio de Dios. Cuando nosotros usamos algo y lo santificamos simplemente estamos diciendo que eso ya no lo vamos a usar para el mundo sino para el servicio a Dios. Nuestras vidas deben estar consagradas al servicio de Dios, por eso hay una diferencia entre el mundo y la iglesia. Que mi amistad ayude a que mi amigo se acerque más a Cristo. En el matrimonio el esposo debe de ayudar a su esposa para que se acerque más a Cristo y viceversa. 

Hace algunos días estaba leyendo la Biblia con mi esposa y leí unos versículos que fueron de bendición para mi vida  y se los compartí a ell y me dijo que del mismo tema ella estaba leyendo otros versículo y me los leyó a mi. Entonces yo pude ser bendición para ella y ella de bendición para mí. No ser una carga a ella, ni ella a mi y si ella está siendo una carga ayudarla a seguir adelante, sirviendo al Señor. Un amigo va a buscar la santificación, va a yudar a su amigo para que se acerque más a Cristo pero pareciera que en el hogar lo menos que queremos en el bienestar de la esposa. Si la esposa está bien toda la casa va a marchar bien. Hay un dicho que dice “si mamá está contenta, todos están contentos”. El objetivo del esposo debe der ser que la esposa esté contenta y el objetivo de la esposa que el esposo esté contento.

Proverbio 27:17 dice, “Hierro con hierro se aguza; Y así el hombre aguza el rostro de su amigo.”

El aguzar es afilar. El rostro representa lo que hay dentro de uno. Cuando en la Palabra de Dios nos menciona del rey de Acab que estaba llorando porque Nabot no le dio la viña y su esposa le dice “¿por qué tu rostro está así? ¿no eres tú el rey?” Acab andaba chipi y su esposa la malvada Jezabel le dijo que ellos iban a hacer algo. Su esposa no era una buena influencia. No podemos hacer mucho cuando la esposa no es de buena influencia. Jezabel en vez de afilar el rostro de Acab de buena manera lo echó a perder más y el plan que tenía ella lo hizo todo peor, arruinó más las cosas porque mataron a Nabot. Eso es lo que no deberíamos de hacer como amigos. Como amigos deberíamos llevarlos a los pies de Cristo, asegurarnos de que su vida es mejor para acercarse a Cristo y asegurarnos que nuestra amistad no le trae a esa persona, tristeza, dolor y ruina sino satisfacción a su vida en cuanto a muchas cosas. Satisfacción en decir “mi amigo no me está trayendo lágrimas, esta amistad no me está trayendo vergüenzas, no me esta trayendo dolor.” El trabajo del esposo debe traer satisfacción y orgullo a la vida de la esposa, lo que la esposa hace debe de traer satisfacción, orgullo, bienestar a la vida del esposo. Como amigos nosotros debemos de ayudar a nuestro amigo, que al final de que haya ese choque (y no es un choque de enojo) pero que haya un buen contacto, porque para que se afile un cuchillo debe de haber un buen contacto y entonces al final va a estar más filoso, va a estar mejor, ahora su rostro está más contento, le he traído bienestar.

Había un pastor que los días lunes viajaba y él decía que una de sus metas era hacer el día de alguien más ya fuera en el aeropuerto, en el taxi o en la iglesia en donde iba a predicar. Quería convertir el día de tristeza de alguien en algo mejor y de repente se encontraba en el aeropuerto a una señora que con voz molesta le pedía su boleto y él siempre quería sacarle una sonrisa y muchas veces lo logró, porque él quería hacer algo con su vida, aguzar, afilar y ayudar a la otra persona. Si voy a ayudar a alguien que es extraño ¿por qué no más con un amigo? si yo tengo un amigo, le voy a hablar de Cristo, si yo tengo un amigo, lo voy a ayudar para que se acerque más a Cristo y que mi vida no le trae tristeza sino le traiga alegría y satisfacción. Que mi amigo diga que no le di la espalda, que no estaba hablando mal de él, que yo como su amigo no soy una carga, que no me la paso pidiendo dinero. Un verdadero amigo es el que a pesar de tener una deuda y problemas económicos pide a su amigo oración por él, ahora le va a echar ganas, va a trabajar más duro, pero él no quiere ser una carga sino simplemente pide oración.

Aguza, afila, ayuda y trae una sonrisa a tus amigos, sé un buen amigo.