¿Qué hacer en tiempos de coronavirus?

Hechos 16:25-31

25 “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían.

26 Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.

27 Despertando el carcelero, y viendo abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido.

28 Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí.

29 El entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas;

30 y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?

31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.”

Aquí están Pablo y Silas en Filipos y están confrontandose con una muchacha que tiene espíritu de adivinación y dice la Biblia que Pablo comienza a hablar con esta muchacha y le dice, “te mando en el nombre de Jesucristo que salgas de ella”. Me gusta lo que dice el versículos 17 “Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación.” El diablo nos conoce si servimos y somos siervos de Dios. Esta muchacha estaba diciendo que ellos eran siervos del Dios altísimo y Pablo pudo haber dicho, esta me cae bien pero no, le dijo “Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella.” El nombre de Cristo tiene poder y la muchacha quedó liberada de este demonio pero los hombres de ahí vieron que la esperanza de su dinero se había arruinado, había caído y estaban enojados con Pablo y aun con Dios. La gente de alrededor cuando ven sus ganancias caer se van a enojar con Dios. Gente va a ver sus ganancias caer y aun su salud y van a renegar el nombre de Dios. Pablo y Silas estaban en la cárcel los habían acusado pero ellos estaban cantando a media noche, los habían azotado, los habían castigado pero ellos estaban contentos y dice la Biblia que cuando pasemos por pruebas debemos de tener sumo gozo. 

Pero de repente vino un terremoto, las puertas se abrieron, el carcelero se despertó (no era un buen velador, estaba dormido) y vio que las puertas estaban abiertas y él pensó que se habían escapado y él pudo haberse escapado pero se quedó y se iba a matar. ¿Que hubieras hecho si estuvieras viendo al que te ha castigado, al que te ha hecho la vida de cuadritos y ha traído aflicción a tu vida? Le hubieras echado porras, pero Pablo levantó la voz y le dijo que no se hiciera daño. El carcelero pidió luz y se dio cuenta que estaban Pablo y Silas y no lo puede entender pero se acuerda de algo, se acuerda de que ellos son diferentes y que en ellos hay algo diferente y les dice, “¿Qué tengo que hacer para ser salvo?” No dijo que tengo que hacer para ser de su religión, él quería ser salvo, quería tener lo mismo que ellos y ellos le dijeron “Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo tú y tu casa.”

La salvación no está en portarnos bien, en ir a una iglesia, en bautizarse o en hacer dos ordenanzas o ritos sino es por creer en el Señor Jesucristo. Si tú has sido el primero de tu casa en ser salvo, no te desanimes no pienses que eres el único y el último porque tu puedes ser el primero de muchos. Pablo y Silas no dijeron que estaban cansados ni que no tenían tiempo sino que tomaron aun este tiempo de crisis en su vida para compartir de Cristo. Creo que en este tiempo que estamos viviendo inigualable, inminente, indescriptible, sin precedentes debemos de continuar haciendo la obra de Dios. Tenemos que seguir adelante, predicando, levantando el nombre de Cristo, pero nos pudiéramos preguntar por qué está pasando todo esto.

Dice en Mateo 24:4-7 “Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán. Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.” Lo que está sucediendo ya estaba profetizado de parte de Dios. Va a haber hambre, pestes y terremotos. Si tu tienes una aplicación puedes darte cuenta del número de terremotos que hay alrededor del mundo; es increíble el número de personas que están huyendo de sus países a otros lugares y todo esto está pasando porque ya estaba profetizado pero también ¿por qué está sucediendo esto? Deuteronomio 28:15 dice “Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán.” Creo que todo está pasando porque la gente se ha apartado de Dios, ya no quiere ver nada con Dios, y cuando la predicación está siendo predicada la gente se tapa los oídos y Dios dice que si no oyes su voz y cumples sus mandamientos eso es lo que te va a pasar. Del versículo 15 al 38 hay una serie de cosas que suceden cuando no obedecemos a Dios Dice el versículo 58 del capítulo 28 “Si no cuidares de poner por obra todas las palabras de esta ley que están escritas en este libro, temiendo este nombre glorioso y temible: JEHOVÁ TU DIOS.” Me encanta como dice JEHOVÁ TU DIOS en mayúsculas porque Jehová es mi Dios. Si tu ya tienes a Cristo en  tu corazón Jehová es tu Dios. Qué bonito cuando algo es nuestro. Dios puede ser nuestro Dios cuando recibimos su salvación a través de Jesucristo. Dice el versículo 59 “entonces Jehová aumentará maravillosamente tus plagas y las plagas de tu descendencia, plagas grandes y permanentes, y enfermedades malignas y duraderas.” ¿Por qué van a venir enfermedades duraderas y malignas? por causa del pecado del hombre, por causa de que se han apartado de Dios y la gente se ha apartado de Dios y ¡cuántas cosas están sucediendo hoy en día! El sida años atrás vino por causa del pecado del hombre .

Esto está sucediendo porque esta profetizado, porque la gente se ha apartado de Dios y porque Cristo viene pronto. Dice 1 corintios 16:22 “El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema. El Señor viene.” Como cristianos debemos de recordar que Cristo viene. 1 Tesalonicenses 4 dice que se va a sonar trompeta y nosotros después de los que hayan muerto en Cristo, seremos llevados a la gloria, a las nubes con el Señor. De tal manera que esto no nos debe de turbar, no nos debe de poner ansiosos, ni siquiera de preocupar sino nos debería de alegrar, porque Cristo viene pronto y todas estas son señales de que él viene pronto. Jesús es quien ha muerto por nosotros y él viene por nosotros. En Isaías 53 dice que él llevó nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores, nosotros le tuvimos por azotado, herido de Dios y abatido. El Señor Jesucristo llevó nuestras enfermedades, él viene pronto no nos debemos de afligir, de turbar es más debemos de regocijarnos porque él viene pronto pero ¿qué debemos de hacer mientras él viene, mientras estamos con este problema? Hay mucho que podemos hacer, por lo menos cuatro cosas. 

1. Mantente ocupado

Dice Lucas 10:38-40 “Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Marta le recibió en su casa.Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.” Marta era una mujer muy afanada, era una mujer muy preocupona, era una mujer que veía un plato sucio y ya lo quería lavar y sí debemos de lavar nuestra casa, nuestros platos, mantener nuestra casa limpia pero que las cosas de alrededor no nos consuman eso también trae enfermedades. Cuando los problemas de allá afuera nos consumen y estamos todos afligidos y afanados podemos terminar peor. 

Llevamos a una de nuestras hijas al doctor y tenía dolor de cabeza y una infección en el ojo y nos dio medicamento para el ojo pero el dolor de cabeza nos dijo que era por preocupación. Nos dijo que estaba teniendo a muchos niños con dolores de cabeza porque había mucha preocupación. Hay mucha preocupación y eso trae más problemas y dice la Biblia que Marta se preocupaba con muchos quehaceres y ella dándole órdenes al Señor Jesús. Quizás Marta poniéndose la mano en la cadera y moviendo su piecito y diciéndole al Señor que le dijera a su hermana que le ayudara y él le dijo “Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.” La Biblia dice que no nos turbemos, tenemos que mantener la calma en lo que sucediendo, no tenemos que sobrerreaccionar hay que reaccionar, hay que tomar precauciones y seguir adelante y mantenernos ocupados. Dice el versículo 42 “Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.” Cuando nosotros estamos preocupados es cuando las cosas allá afuera tienen control de nosotros, nos han atado ya no podemos movernos ya no sabemos que hacer, nos sentimos turbados, ni siquiera pensamos bien y Jesús dice “María ha escogido la parte principal y lo importante es que ella está escuchándome, está pasando un  tiempo conmigo”. 

En este tiempo de crisis pasa un tiempo con Jesús. Dile que no te preocupe lo de afuera y te ayude a pasar un tiempo hermoso con él. María estaba ocupada en lo importante y necesario. En la ocupación es cuando tenemos control de la situación. La situación no nos está controlando, empujando o turbando. Con Jesús a nuestro lado podemos estar en control de la situación. Ocupados en lo que necesitamos estar ocupados. El afán y la preocupación y el estar todos turbados y aún el ocio (que es lo contrario). Con la preocupación andamos corriendo por acá y por allá y cuando estamos ociosos estamos sentados haciendo nada. Tenemos que ocuparnos y hay cosas de la cosas que nos debemos de ocupar.

De nada nos ayuda el estar ociosos. Estamos en nuestra casa, ya no hay trabajo, ya no hay escuela y en vez de que estemos ocupado en cosas productivas estamos ocupados en cosas que nada ayudan, es mas quizás estamos ocupados en cosas que nos están perjudicando más. No tomemos este tiempo para ocuparnos en cosas que nos perjudican mas sino en algo que nos ayude. 1 Timoteo 4:13 dice, “Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza.” Pablo le está diciendo a Timoteo que esta era una manera de que le fuera bien y siguiera adelante. Tenemos que ocuparnos más en la lectura, en servir a Dios, en hacer cosas productivas para el Señor. Creo que podemos hacer cosas de servir al Señor pero algunas cosas prácticas que me gustaría mencionar: 

• Lee un buen libro. A mi me encantan las biografías y hace tiempo antes de una conferencia de misiones leímos un libro de Bruchko y es un libro increíble. Lee libros de Adoniram Judson de William Carey etc. 
• Escribe un libro, creo que tenemos ciertos dones que no estamos ocupando. Un pastor que hace años estaba bien enfermo, en el lecho de muerte le dijo a Dios que si él le daba vida iba a comenzar a escribir. Dios le dio vida y ya lleva dos libros y está a punto de escribir su tercer libro y gracias a Dios. 
• Termina ese proyecto en casa. Tu esposa te dijo que le ayudaras con la lavadora y ya lleva tres años descompuesta. Haz algo.
• Pasa un tiempo con tus hijos 
• Toma un curso en línea. Tenemos el Instituto en línea para que pudieras tomar una clase.
• Aprende algo nuevo
• Pasa tiempo con tu familia. Si no estás bien con tu esposa, pídele perdón. Si no estás bien con tu esposo, pídele perdón y ya que le pediste perdón ve a dar una vuelta allí en tu colonia.
• Comienza a dar un estudio bíblico en casa. Quizás puedes invitar a un vecino. Toma el tiempo para mantenerte ocupado. 

2. Mantente Orando

Mateo 6:33 dice, “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” Esto lo dijo después del afán. En vez de estar afanado y turbado busca a Dios. En la mañana busca a Dios; cuando vayas a tomar una decisión busca a Dios aun en medio de la aflicción busca a Dios como Ana. Ana estaba afligida era algo serio el no poder tener hijos, porque Penina le hacía la vida de cuadritos. 

1 Samuel 1:11 dice “E hizo voto, diciendo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.” Quizás, estás afligido y triste pero puedes orar a Dios. Salmos 119:153 dice “Mira mi aflicción, y líbrame Porque de tu ley no me he olvidado.” Cuando estamos en aflicción muchas veces es el momento en que Dios mas nos quiere ayudar. Ahora no hay que esperarnos hasta el último momento para pedir ayuda a Dios, tenemos que acordarnos de Dios ahorita. No tienes que acordarte de Dios cuando ya tengas el rotavirus, el coronavirus o cualquier tipo de virus, sino ahorita te puedes acordar de Dios y puedes orar a Dios. Dice la Biblia “Orad sin cesar” tenemos que pasar más tiempo orando a Dios.

3. Mantente obedeciendo

Cuando Pablo y Silas estaban en la cárcel, ellos siguieron obedeciendo a Dios. Cuando José estaba en la casa de Potifar y esta señora se quería aprovechar de él, siguió obedeciendo a Dios. Pase la crisis que pase, suceda lo que suceda sigue obedeciendo a Dios. Levítico 19:37 dice, “Guardad, pues, todos mis estatutos y todas mis ordenanzas, y ponedlos por obra. Yo Jehová.” Dios quiere que guardemos su palabra.  Jesús dijo “Si me amáis guardad mis mandamientos”. 

Dios nos ha escrito una carta de amor y dice que guardemos sus mandamientos y no digamos que son difíciles, que es difícil ir a la iglesia, no decir mentiras, no tomar, no bailar, no emborracharse, no fumar y no portarnos mal, no adulterar, no fornicar. No deberíamos de pensar así porque los mandamientos de Jehová no son gravosos y cuando él nos escribe esta carta de amor lo hace porque nos ama y cuando leemos su carta de amor no debemos de decir que Dios es malo, que él no quiere que disfrutemos la vida, sino que debemos de decir que tenemos un Dios que es tan bueno y nos pide tan poquito en comparación a todo lo que él nos va a dar. El tiene una mansión celestial y cuando estemos en el cielo con él, vamos a decir que tan poquito nos pidió Dios para todo lo grande que nos ha dado. No se compara lo que nos espera a lo poco que Dios nos pide que hagamos. Guardemos sus mandamientos, obedezcamos. En este tiempo de crisis no bajemos la guardia, no volvamos atrás al contrario, sigamos creciendo en la obra de Dios. 

Pablo y Silas estaban en un tiempo de crisis pero ellos seguían alabando a Dios, testificando, llevando un buen testimonio y el carcelero se dio cuenta y él les dijo: “Señores que tengo que hacer para ser salvo?” Nuestra obediencia a Dios va a llevar a muchos a los pies de Cristo.

4. Mantente ofreciendo el agua de Cristo

Dice Juan 4:13-14 “Respondió Jesús y le dijo: Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.” No solamente dice nunca mas voy a tener sed pero yo mismo voy a ser una fuente para otros para que ellos puedan tener vida eterna. 

Como hijos de Dios al ver lo que está pasando en  medio de esta crisis tenemos una gran responsabilidad de hablar a alguien de Cristo. Pablo y Silas pudieron haber dicho que no podían estaban en la cárcel, pero ellos le hablaron al carcelero. Toma la oportunidad, hablale a alguien. Aun compartiendo por facebook o por whatsapp yo sé que no es una manera directa pero puedes tomar oportunidad de la tecnología.

Transmitimos un devocional y una hermana de la iglesia lo compartió con una familiar que no es cristiana. Al siguiente día esta familiar le mando un whatsapp diciéndole que no le había mandado el devocional del dia, ella no pensaba que le había gustado. Le mando el segundo y el tercero y gracias a Dios. Tú no sabes quien va a recibir algo y lo va a ver y le va a ayudar pero asegurate que mandas cosas buenas y no chuecas y malas sino cosas que les van a llevar a los pies de Cristo. 

Dice en Hechos 16:29-34 “El entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas; y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa. Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos. Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios.”  

Pablo y Silas nunca se hubieran imaginado que en esa misma noche iban a terminar cenando o desayunando por ahí de las tres o cuatro de la mañana después de haber tenido un culto de avivamiento en la casa del carcelero que muy posiblemente los había golpeado y ahora eran hermanos en Cristo y  no solamente el carcelero sino toda su casa escucharon de la salvación que hay en Cristo Jesús. Al final yo creo que Pablo y Silas dijeron que había valido la pena, no haber claudicado, ni rendido y haber seguido adelante. 

Va valer la pena seguir adelante estos días, no pierdas tu fe, mantente confiado en Cristo. No te preocupes tanto, ocúpate y dile al Señor que te ayude a seguir adelante confiando en él. Esto pronto va a pasar y creo que tenemos una gran responsabilidad de salir mejor a como estábamos antes, que esta llamada de atención nos ayude a ti y a mí a echarle mas ganas, a entregarnos más a la obra de Cristo porque vale la pena.