LAS CONSECUENCIAS DEL PECADO 

Génesis 3:1-6

3:1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?

3:2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer;

3:3 pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.

3:4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

Dice la palabra de Dios que aquí está el diablo en forma de una serpiente astuta, dice la Biblia, “más que todos los animales del campos” y comienza esta serpiente a hablar con la mujer, y le dice, ésta primera palabra “Conque” y el diablo siempre va a usar palabras para hacernos dudar de la palabra de Dios. 

Hermano debes de tener cuidado cuando escuchas allá afuera la duda del diablo que entra en tu corazón y de repente tu estás vacilando entre dos pensamientos y estás tratando de decir “¿será o no será cierto? ¿será palabra de Dios? o no será palabra de Dios”. 

El diablo viene y vino con Eva y le dijo “¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?” Eso no era lo que dijo Dios; lo que dijo Dios es “No comas de éste árbol que está en medio del huerto”. Pero el diablo cambia las cosas para que tu comiences a dudar de Dios. El diablo es mentiroso desde el principio, no puedes confiar en él, no te tienes que detener a escucharlo, tienes que apartarte y alejarte de la mentira del diablo.

Y aquí está la mujer hablando con ésta serpiente y dice: 

Génesis 3:2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; está diciendo una verdad

Génesis 3:3 pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, (aquí ya Eva le está añadiendo a la palabra de Dios, veamos Génesis 2:17) para que no muráis. 

Génesis 2:17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. Y aquí está Eva (Génesis 3:3) y Dios no le dijo “no comas ni le toques”, Dios no dijo “no comas, ni lo toques, ni lo veas”. Ahora cuando Dios me dice “esto no tienes que comer” Ciertamente ni nos deberíamos de acercar a él, ni verlo. Pero aquí está Eva dándose una vuelta cerca de éste árbol y como que le está llamando la atención y así somos nosotros como Eva, que sabemos que no nos debemos de acercar a algo, y ahí estamos. Le decimos a un niño “no toques ésto” y lo quiere tocar. Eva está ahí cerquita y dice la Biblia que ella responde “Bueno Dios me dijo que no lo comamos ni lo toquemos, para no morir”. Y ciertamente Dios estaba diciendo eso.

Génesis 3:4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

Génesis 3:5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, (esto es cierto) y seréis como Dios, (esto no es cierto) sabiendo el bien y el mal.

La gente va a buscar ciertas cosas, la gente está buscando, dice aquí “serán abiertos vuestros ojos”, nosotros tenemos un hambre dentro de cada uno de nosotros, tenemos un hambre de conocimiento; y cuando la serpiente le dijo a Eva “tus ojos van a ser abiertos”, la serpiente, el diablo le estaba diciendo a Eva, “mira tu tienes en tus manos, la capacidad de que si tu comes de éste fruto ahora vas a tener más conocimiento” nosotros estamos hechos de cierta manera que tenemos hambre por el conocimiento, cuando Pablo fue allá a predicar a Grecia, sabemos que tenían tantos dioses y había uno que decían “bueno aun nos falta uno, que ni lo conocemos pero lo vamos a adorar” y los griegos ellos tenían tanta hambre por tener más conocimiento; y hermano no hay problema de querer más conocimiento, pero, hay un conocimiento que viene del cielo del cual nosotros deberíamos de tener hambre, no allá afuera sino aquí adentro. 

Y dice en seguida (Génesis 3:5) y seréis como Dios, tenemos un hambre no solamente de tener más conocimiento, pero tenemos un hambre de tener más poder, y cuando le dicen a Eva, “mira vas a ser como Dios” Eva dice “¡wow! pues Dios es poderoso, yo quiero tener conocimiento como Dios y yo quiero tener poder como Dios, si yo llego a comer de ese fruto entonces voy a tener el poder que Dios tiene” y el diablo estaba diciendo “¡si!, tu puedes tener el poder de Dios, el poder ser como Dios”.

Y luego Dice Génesis 3:5) sabiendo el bien y el mal. La tercera cosa de la cual tenemos hambre es de sabiduría, tenemos hambre de sabiduría de conocimiento, y de ser como Dios, y entonces:

Génesis 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, (se le quedó viendo, yo creo que era un árbol de mango, algunos quizá piensen que era un tamarindo, algunos quizá que era un plátano, a lo mejor algunos una papaya ¡que ricas son las papayas! quizá un melón, guayabas, limones, pero; dice la Biblia que la mujer se le queda viendo a éste árbol, vio que era bueno para comer) y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó  de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

Y aquí están éstos tres pasos que nos llevan a caer al pecado, el primer paso dice aquí “y vio” y cuando nosotros nos le quedamos viendo, comenzamos a pensar “y ¿qué pasaría si lo tomo? y ¿qué pasaría si lo como? y ¿qué pasaría si me echo esa cervecita? ¡oh yo ya se que no debo echarme la cerveza!, pero, ¡qué tal si me la vuelvo a tomar!. Y dice ahí “era bueno, codiciable, y nos la estamos imaginando, con hielo y, yo no… pero yo se como piensan ustedes, y me la imagino con hielo y me la imagino con no se, tiene algo blanco, no se si es  con azúcar o sal, pero le ponen eso encima, le ponen limón y se te cae la baba y dices “¡no! ¡me la compro! ¡una vez más!” ¿por qué? porque te le quedaste viendo, si sabes que tienes problemas con la cerveza y alcohol, hermano, hermana te tienes que apartar de los lugares donde hay cerveza y alcohol. 

Si sabes que tienes un problema con el bailar, y te gusta bailar y te subes a cada ratito a estos camiones (ya no hay tantos) pero hay camiones que ponen la música y te recuerdas y al ratito estás pensando “yo me acuerdo como yo bailaba, yo me acuerdo que era rete bueno, yo me acuerdo que todo mundo me aplaudía y  me empujaban para que bailara” y entonces otra vez me encuentro bailando.

Si sabes que tienes un problema con el adulterio, deja de ir a lugares donde hay adulterio. Si sabes que tienes un problema con la pornográfia deja de ir a lugares y estar viendo cosas que te van a llevar a eso. Si sabes que tienes un problema con la mentira ¡deja de mentir!.

Si sabes que tienes un problema con el sexo opuesto, deja de buscarlo y regresa a tu hogar y regresa a tu esposa, y joven mantente puro y guárdate para el Señor. 

Dios está diciendo “si tu te le quedas viendo a esto Génesis 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

Y luego ¿cuál fue el siguiente paso? Tomó, tomo de esto, lo vió y lo tomó y cuando lo tomó dijo “¡wow! este mango que rico se ve, y lo empezó a oler, y dijo ¡wow! que rico huele, y lo empezó a pelar, dijo ¡wow! este mango me está diciendo cómeme y dice la Biblia, el siguiente paso “ y comió; y dio también a su marido,” Y le dijo ¡oye Adán! no estaba tan mal, Dios nos dijo que no comieras de este mango, pero yo no le encuentro nada malo”. Y así es la gente cuando prueban el pecado, dicen “ay la gente dice que es tan malo, ¡no, no es tan malo”.

El día de ayer estábamos en San Luis Potosí y llegó un muchacho que no se si llevo a alguien a la iglesia, pero estaba estacionado afuera de la iglesia, y tenía una cerveza y un cigarro en su mano y un hermano (hay una puerta que va al patio de la iglesia)  estaba ahí hablando con él y le estaba diciendo “joven deja esos vicios” y yo nada más iba pasando, pero así es el chisme ¿amén? vas pasando y quieres cómo que caminar más despacio, ya mis pies iban por allá y mi oreja estaba aquí donde ellos, y el hermano le decía “joven, deja los vicios” y este joven le comienza a contestar y le dice “hay muchos vicios no solamente son estos vicios, hay muchos vicios”, y se estaba jactando y estaba diciendo “hay vicios de esto y de aquello” y me acuerdo que dijo una palabra “mujeres”; y dije “¡wow!”.

Así es el pecado, el pecado, tu dices “hay no está tan mal el vicio, ustedes que ven mal el vicio, pero yo ya he probado; yo ya he probado el alcohol y no es tanto problema, ya he probado el cigarro, y he probado esto y aquello y las mujeres, y está bien, ¡está bien! no hay tanto problema”. Hermano ¡NO esta bien! porque por causa de esos pecados, Cristo vino a morir en la cruz del calvario, esos pecados condenaron a mi Cristo y por esa razón Dios envió a Jesús a morir por nuestros pecados, el mundo dice “¡está bien!” Eva dijo “¡no está tan mal!”. 

“No está tan mal el chisme, no está tan mal la mentira, no está tan mal el echarme una canita al aire, dice la gente”. Una vez me subí a un taxi y le dije al conductor que era pastor, y dijo “¡ah entonces me voy a confesar con usted!” y yo le dije “usted no sabe cuanto yo cobro”. Pero se comenzó a confesar, y como a mi no me gusta el chisme, me comenzó a decir “hace tres días hice un viaje y entonces vi un lugar y entré ahí y caí y peque, pero nada más fue una canita al aire”. ¡Sí, esas canitas al aire, es pecado contra Dios! ¡Esas canitas al aire destruyen tu vida! Ese pecado te va destruir, hay consecuencias del pecado. 

La primera de ellas que quiero mencionar es que 

1.- El pecado avergüenza

Veamos el siguiente versículo 

Génesis 3:7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales. 

Estaban desnudos y estaban ahora avergonzados y se estaban escondiendo, pero aparte de todo es sabían dentro de su corazón que habían pecado contra Dios, sabían dentro de su corazón que estaban pisoteando la sangre de Cristo, sabían dentro de su corazón que lo que habían hecho había estado mal. 

Veamos 2a Crónicas 30:14 

Aquí hay una historia en donde el rey comienza y le dice a la gente y al pueblo vamos nosotros a comenzar a tener la pascua, no la habían tenido por mucho tiempo y Ezequías les dice, vamos a continuar con la pascua y dice en el versículo 14;  

2a Crónicas 30:14  Y levantándose, quitaron los altares que había en Jerusalén; quitaron también todos los altares de incienso, y los echaron al torrente de Cedrón.

30:15 Entonces sacrificaron la pascua, a los catorce días del mes segundo; y los sacerdotes y los levitas llenos de vergüenza se santificaron, y trajeron los holocaustos a la casa de Jehová

Los sacerdotes y los levitas estaban llenos de vergüenza porque estaban viviendo una vida impura, estaban viviendo una vida sin Dios, una vida no cumpliendo las cosas que Dios les decía que hicieran, y estaban llenos de vergüenza. Y eso es lo que hace el pecado, el pecado avergüenza.

Sofonías 3:5 Jehová en medio de ella es justo, no hará iniquidad; de mañana sacará a luz su juicio, nunca faltará; pero el perverso no conoce la vergüenza.

El perverso lo ha hecho tantas veces y ha caído tantas veces, que ahora ya a perdido la vergüenza, ya no se le hace tan mal pecar, ya no se le hace tan mal hacer cosas que van encontra de la palabra de Dios, porque el pecado así es. El pecado comienza a cauterizar el alma, lo haces una vez y ¡wow! que mal te sientes, lo vuelves hacer y otra vez te sientes mal, pero ya no te sientes tan mal. Y el diablo empieza a hablar a nuestros oídos y te dice “mira, no te pasó nada. Mira, robaste y nadie se dio cuenta ¡Vuelvelo hacer! y entonces lo vuelves hacer. Y el diablo nuevamente viene contigo ¡wow! mira, robaste 100 pesos, ahora puedes robar 200 y dices ¡Pues sí verdad, puedo robar 200! 100 pesos o 200 pesos que más diferencia hay.”

Hace años llegaron unos jóvenes a nuestra iglesia y venían huyendo de la Ciudad de México. A uno de sus hermanos, la siguiente semana se regresó y creo que dijo que ya lo habían atrapado, él se quedó ahí y dijo “yo quiero transformar mi vida con la Biblia pero si me quedo en México… ¡no he podido!” y me comenzó a contar sus vicios de drogas y se les acabó el dinero por tanta droga y me dijo “entonces comenzamos a robar” ya después robamos no solamente tanques de gas, robabamos cables, robamos tubos, robamos de estas cochinas que hay en la azotea, y en la calle con cadenas; pastor robamos miles y miles y miles y miles y miles de pesos” y comienza robando uno robando 100 esos y termina uno robando mil, diez mil, cien mil; y el diablo dice “mira, ya robaste 50 mil, no te ha pasado nada, mira ya adulteraste, fornicaste  y no has tenido ninguna enfermedad veneria; mira estas tomando, ya llevas 5 años y no te has muerto; mira estás fumando, ya llevas 10 años y no te has muerto; y has hecho esto y no te pasa nada”. 

Eso es lo que dice el diablo “no pasa nada” “no te va a suceder nada” “todo está bien”. ¡Hermano no te creas esa mentira del diablo!. El diablo te dice “no te va a pasar nada” el sinvergüenza dice “aaah! no pasa nada”. 

Hace años creo que cuando yo estaba en 5° o 6° de primaria, una de mis maestras, no se porque, yo era tan buen niño en la primaria y era creo que 5° grado y yo estaba hablando con ella y me regañó en frente de todos y me dijo “¡Arturo! tu nisiquiera sabes de qué color es la vergüenza” y yo realmente, y a veces me acuerdo de David; porque yo realmente no sabía de qué estaba hablando, y yo no lo trate de hacer de burla ni nada, y yo le dije “sí maestra, yo se de qué color es la vergüenza, en serio “ y con una carita bonita; y me dijo muy exaltada “y ¿de qué color es la vergüenza?” y yo le dije “roja”. ¡Y se enojó más! y me mandó a sentar, creo que me quería matar en ese momento. No había hecho nada malo, así a veces la agarran las maestras contra los niños buenos ¿amén?

Veamos lo que dice la palabra de Dios. 

El pecado trae vergüenza al pecador, y Dios pone en nosotros su Espíritu Santo y dice la palabra de Dios que cuando pecamos, contristamos al Espíritu Santo, pero también cuando nosotros pecamos el Espíritu Santo dice “eso estuvo mal y nos trae a nosotros vergüenza veamos 

Salmos 44:15  Cada día mi vergüenza está delante de mí,

        Y la confusión de mi rostro me cubre,

El mundo ahora está diciendo “mira no, eso ya no te debería de avergonzar, lo que tu haces, mira si ahora vives con tres o cuatro mujeres, eso no te debería de avergonzar. Jovencito si estás viviendo una vida promiscua, eso no te debería de avergonzar. Sí estás haciendo algo “¡oh! eso antes era malo” ahora eso ya no te debería de avergonzar. En nuestros días estamos viendo hombres casándose con hombres, mujeres casándose con mujeres, y el mundo dice, eso no te debería de avergonzar. Pero la Biblia dice que eso trae afrenta y vergüenza, no solamente a quién lo comete y lo hace, pero, trae vergüenza también a otros. 

Proverbios 19:26 El que roba a su padre y ahuyenta a su madre,

  Es hijo que causa vergüenza y acarrea oprobio.

El que roba a su padre y dice y ahuyenta a su madre, quizá le dice de cosas, quizá tu joven estas gritándole a tu papá y le dices a tu papá cosas. Y yo recuerdo allá con mis primos, mis primos viviendo en la casa de mi abuela y mis tíos regañando a uno de mis primos y se oían los gritos de mi tía hacía mi primo y de mi primo hacía la tía y gritándose unos a otros. Dice Proverbios 19:26 El que roba a su padre y ahuyenta a su madre,

  Es hijo que causa vergüenza y acarrea oprobio.

De tal manera que el pecado avergüenza; avergüenza al que lo comete, Adán y Eva ahora estaban avergonzados, Adán y Eva ahora estaban allá escondiéndose, Adán y Eva ya no sabían ni siquiera que hacer y Dios los comenzó a buscar y comenzó a decir “¡Hey! Adán ¿en dónde estás? ¡Eva! ¿en dónde estás?” ¿Sabía Dios dónde estaban Adán y Eva? ¡Si, Él sabía!. No podemos escondernos de Dios ¿amén?. No podemos escondernos de Dios, no podemos esconder lo que hacemos, no podemos esconder lo que vemos, no podemos esconder nuestro pecado, porque ¡Dios lo conoce todo!.

Pero el diablo dice “aaah Dios no se da cuenta”. Sí Dios se da cuenta.

El pecado avergüenza al pecador, el pecado avergüenza a otros, el pecado aún cuando desobedecemos a Dios trae vergüenza aun a la iglesia. 

Veamos lo que dice 

1a de Corintios 15:34 Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo.

Dios dice “mantente vivo, abusado, porque el diablo anda como león rugiente buscando a quien devorar, no te duermas en tus laureles, mantente despierto, no peques” 1a Corintios 15:34b porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo. 

¿Por qué algunos no conocen a Dios? Por nuestro pecado, tu continua pecando contra Dios, el diablo te va a sacar de la iglesia y muchos no van a conocer a Dios porque van a decir “ese es cristiano y mira cómo vive su vida, yo no quiero nada de las cosas de Cristo ni de las cosas de Dios”. Por causa de nuestro pecado, y dice después 1a Corintios 15:34c para vergüenza vuestra lo digo.   

No conocen a Dios por tu pecado y no conocen a Dios porque no estás hablándoles de Cristo, no puedes hablarles de Cristo, porque sabes que hay pecado en tu vida. Mira cuando estamos metidos en pecado, no queremos ir con alguien y decirle “mira conoce a mi Dios, conoce a mi Cristo él me ha cambiado” y ando así todo tirado (haciendo como borracho) “Él me ha cambiado’” (y tengo dos tres mujeres alrededor) “Él me ha cambiado” y tengo una banderita del arcoíris, “Él me ha cambiado” y estoy todo drogado, “Él me ha cambiado” y un montón de mentiras, “El me ha cambiado” y tiiiiiii, tiiiiiiii, tiiiiiiiii (un montón de malas palabras) “Él me ha cambiado” y realmente estás en pecado. Y eso trae vergüenza a la iglesia y al nombre de Cristo porque no podemos hablarle a la gente de Cristo. 

El pecado avergüenza.

2.- El pecado aleja 

Veamos lo que dice Génesis 3:8

¡Se los advertí hermanos! ¿pero de qué sirve una iglesia si no nos recuerda que hay ciertas cosas que estamos haciendo mal? ¿amén?

Génesis 3:8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.

No nos podemos esconder de la presencia de Dios pero lo que si estaba haciendo el pecado es que estaba alejando a ellos de Dios. El pecado destruye nuestra buena relación que nosotros tenemos con Dios, de la misma manera que cuando en nuestro hogar, un hijo una hija es desobediente esa relación se empieza a destruir y se empieza uno a alejar, si no se restaura esa relación y comunión cuando nosotros pecamos contra Dios, el pecado nos empieza a alejar, a alejar de Dios, alejar de Él, de su presencia, y pronto nos encontramos tan lejos y tan lejos de Dios. 

Jonás, él se quería alejar de la presencia de Dios y entonces llega a un lugar y dice “¡wow! necesito un barco que me lleve allá lejos” y lo encontró y pagó y comenzó  a alejarse cada vez más de la voluntad de Dios, de lo que Dios quería que él hiciera para su vida. 

Quizá tu sabe que es lo que Dios quiere para tu vida y tu dices “yo no lo quiero hacer, yo no quiero hacer lo que yo ya se que debo de hacer”. “Yo ya se que debo de citar a un muchacho cristiano a una señorita cristiana, pero me voy a alejar, no importa”. Y vas a pagar las consecuencias joven, vas a pagar las consecuencias duramente; porque el pecado te comienza a alejar y entre más lejos menos escuchas la voz de Dios, entre más lejos tus amigos te van a decir “estas bien”, entre más lejos, el diablo va a decir “muy bien, vas muy bien, mira no te pasa nada, estás muy bien”; y nos aleja de Dios, el pecado te va a llevar más lejos de lo que tu quieres ir.

Tu quizá te quieres ir un paso lejos, y el pecado te va arrastrar otro paso y el pecado te va arrastrar otro paso y  otro paso y otro paso y otro paso, es lo que le pasó a Giezi.

Veamos lo que dice en 

2a Reyes 5:20 Entonces Giezi, criado de Eliseo el varón de Dios, dijo entre sí: Y cuando nosotros comenzamos a pensar, aquí (en la cabeza) entre sí, nos metemos en problemas, cuando nosotros nos decimos entre sí y dice la Biblia que Giezi dijo entre sí “oye Giezi ¿qué pasaría si haces esto?” y entonces contestó entre sí “¡oh! pues yo creo que va a estar bien, no va a estar tan mal. ¿Qué será de malo si nosotros vamos con Naamán y le pedimos esos vestidos y lo que le iba a dar ahí al profeta, ve, no va a pasar nada” y dijo “no pues sí, ¿qué de malo puede pasar?” entonces, dice la Biblia que dijo entre sí…   He aquí mi señor estorbó a este sirio Naamán, no tomando de su mano las cosas que había traído. Vive Jehová, Que interesante que cuando queremos hacer algo malo a veces, hasta incluimos  Dios en nuestros malos planes. “Hay, que Dios me ayude, me encomiendo Señor, tu sabes que no voy hacer nada malo, una canita; Tu creaste a la mujer y esto y aquello” y comenzamos a usar su palabra y cambiarla para nuestros malvados planes. que correré yo tras él y tomaré de él alguna cosa.

5:21 Y siguió Giezi a Naamán; y cuando vio Naamán que venía corriendo tras él, se bajó del carro para recibirle, y dijo: ¿Va todo bien? 

5:22 Y él dijo: Bien. Mi señor me envía a decirte: ¿verdad o mentira? Mentira He aquí vinieron a mí en esta hora del monte de Efraín dos jóvenes otra mentira parte de la mentira de los hijos de los profetas; ¡oh! incluyó aquí cosas santas y espirituales, te ruego que les des un talento de plata, un talento era un garrafón, era una medida de un garrafón de agua, de tal manera que le dijo, “mira na’ mas dame, no una moneda no dos, no cinco, nada más danos un talento” ¡Un talento! ¡imagínate cuánto pesaría un talento de plata! (más o menos 30 kilos) y luego continúa diciendo  y dos vestidos nuevos. 

5:23 Dijo Naamán: Te ruego que tomes dos talentos. Y le insistió, Giezi dijo, no dos talentos no, y Naamán decia andale, y Giezi respondió no no, nada más uno. Naamán: andale dos. Giezi: mmm ok esta bien, dos. Y dice  y ató dos talentos de plata en dos bolsas, y dos vestidos nuevos, y lo puso todo a cuestas a dos de sus criados porque eran 60 kilos de planta más los dos vestidos nuevos para que lo llevasen delante de él

5:24 Y así que llegó a un lugar secreto, joven ¿qué estás haciendo en lo secreto? ¿amén? joven tienes que cuidar tus ojos, tu vida, tu pureza, lo que estás haciendo en secreto, todo lo que haces en secreto, no pienses que no se va a descubrir un día, y dice que se fue a un lugar secreto. Cuando iban entrando éstos dos siervos sabían en dónde estaba la entrada y dijeron “vamos por ahí verdad” y él dijo “no, no, no, vamos por aquí entras”. “y ¿por qué no por la entrada principal?. ¡Oh! es que queremos que sea una sorpresa, otra mentira y entonces entran por un lugar secreto y…   él lo tomó de mano de ellos, y “ahí quédense, no vamos hacer ruido” quizá estaba por ahí el profeta.. y lo guardó en la casa; luego mandķ a los hombres que se fuesen. Ni siquiera los invito “¡Ah! están cansados ¿no quieren una limonada? ¡no! que tal si los veían ahí verdad el profeta. 

5:25 Y él entró, y se puso delante de su señor. ¿cómo se habrá puesto? ha deber llegado el profeta y decirle “hola ¿qué pasó y Giezi: ¡Todo bien! con una sonrisa… Y Eliseo le dijo: ¿De dónde vienes, Giezi? Y él dijo: Tu siervo no ha ido a ninguna parte. Otra mentira 

5:26 El entonces le dijo: ¿No estaba también allí mi corazón, cuando el hombre volvió de su carro a recibirte? ¿Es tiempo de tomar plata, y de tomar vestidos, olivares, viñas, ovejas, bueyes, siervos y siervas? 

5:27 Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu descendencia para siempre. Y salió de delante de él leproso, blanco como la nieve.

La lepra de Naamán ahora la tenía Giezi, el pecado te va a llegar más lejos de lo que quieres ir, el pecado te va a mantener mucho más tiempo de lo que tu te quieres quedar. Tu has de decir “voy a quedarme en esto, solamente un día, voy a quedarme en esto solamente una hora, voy a quedarme en esto no lo voy hacer por mucho tiempo pero voy solamente a hacerlo una hora, un día, no voy a tomar tiempo, una sola vez”. Pero el pecado te va a mantener ahí más tiempo de lo que tu quieres estar, así es el pecado cuando entramos al pecado y le damos esa entrada y decimos “todo va a estar bien” el pecado te va a mantener ahí más tiempo del que tu te puedes imaginar, tu querías quizá una hora, un minuto y cuando de repente te das cuenta ya llevas toda una vida, ya llevas un mes, ya llevas un año, ya llevas 5 años y ahora es más difícil y ahora es más problema, tienes dificultades en el hogar, el trabajo y todo ¿por qué?. Por causa del cochino pecado. Así es el pecado.

 

Marcos 14:66 Estando Pedro abajo, en el patio, vino una de las criadas del sumo sacerdote; 

14:67 y cuando vio a Pedro que se calentaba, mirándole, dijo: Tú también estabas con Jesús el nazareno. 

14:68 Mas él negó, diciendo: No le conozco, Sabes que es pecado cuando nosotros decimos y negamos el nombre de Cristo, cuando ya Dios te ha salvado, cuando ya eres hijo de Dios. Pecamos contra Dios cuando el domingo pretendemos que somos cristianos y el lunes le niegues, el martes le niegas, el miércoles le niegas, el jueves le niegas, el viernes le niegas, el sábado le niegas. Vives una vida completamente apartada y alejado de Dios, viviendo en el mundo en las cosas que hacías antes y el domingo una transformación total. Y que bueno que vienes a la iglesia y que bueno que quieres otra vez acercarte a Dios, pero no debería de ser así. Dice que le negó y dijo “¡ah! yo no conozco a ese hombre”  ni sé lo que dices. Y salió a la entrada; y cantó el gallo. 

14:69 Y la criada, viéndole otra vez, comenzó a decir a los que estaban allí: Este es de ellos. 14:70 Pero él negó otra vez. Y poco después, los que estaban allí dijeron otra vez a Pedro: Verdaderamente tú eres de ellos; porque eres galileo, y tu manera de hablar es semejante a la de ellos. ¡Sabemos como ustedes hablan! 

14:71 Entonces él comenzó a maldecir, a decir malas palabras, groserías y tiiiiiiii, tiiiiiiiii, tiiiiiiiii salían un montón de cosas, les voy a demostrar, ti ti ti ti ti ti ti ti ti, y yo no soy cristiano tu tu tu tu tu tu tu tu tu, y hasta me se las canciones de allá afuera, y aquí está Pedro diciendo… y a jurar: No conozco a este hombre de quien habláis. 

14:72 Y el gallo cantó la segunda vez. Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces. Y pensando en esto, lloraba.

Pedro dice la Biblia que él lloraba y lloraba amargamente, lloraba con tanto dolor porque él no podía creer que aun que no había el cometido un pecado increíblemente grande, no había matado a nadie, no había cometido fornicación, no se había drogado, no había hecho algo tan pecaminoso, él había negado a Cristo, él había negado a Cristo con sus acciones con su vida, con su hablar. Y hermano cuando tu niegas a Cristo ¿que hay en tu corazón? ¿todo está bien? tu vida como vives, si niegas a Cristo durante la semana al final dices “¡oh! ¡que mal he hecho! No compartir de Cristo, que mal he hecho, no siendo una buena esposa, no siendo un buen esposo, nos la pasamos peleando, nos la pasamos gritando, nos la pasamos haciendo un montón de cosas tan malas. ¡Estas negando a Cristo! ¡Estás negando su palabra! ¡Esas negando que eres hijo de Dios! 

Y aquí está Pedro y cantó el gallo. 

Y hay cosas que nos tiene que recordar que andamos mal, yo creo que si hay dos cosas porque dice la Biblia que el gallo cantó dos veces, y si hay dos cosas que nos pueden recordar que andamos mal, una es la predicación de la palabra de Dios y otra es su Palabra, cuando tu la lees constantemente, y cuando el cristiano está leyendo la palabra y orando, Dios de alguna manera está diciendo ¿sabes? ¡eso eso que estás haciendo está mal! ¡Ay pastor por eso no leo la Biblia, porque la Biblia me dice en lo que estoy mal! ¡No! Es bueno leer la Biblia, es bueno que nos demos cuenta en que andamos mal, la Biblia está escrita para nuestro bien, Dios no nos dejó la Biblia para decir “¡Esto te lo voy a dejar para que vivas una vida miserable ja ja ja!” ¡No! Es para nuestro bienestar, es para que Dios me bendiga, es para ayudarme en mi familia, en todo el ámbito aún en lo financiero ¡Dios me quiere bendecir! y no he visto a un cristiano todavía que se acerca más a Dios y se acerca más a su Palabra que no está viviendo una vida llena de alegría de felicidad, ¿por qué? porque esa es la vida cristiana. Pero, el diablo nos miente tantas veces. 

Entonces número 1.-El pecado nos avergüenza, número 2.- El pecado nos aleja, y te aleja más de lo que quieres ir y te mantiene más de lo que te quieres quedar y te cuesta más de lo que estás dispuesto a pagar; quieres pagar un poquito pero terminas pagando el doble, el triple, diez veces más, veinte veces más, cien veces más.

3.- El pecado alcanza

Dice la palabra de Dios.

Dios le pregunta a Adán, y le hace ésta pregunta y le dice ¿dónde estás tú? ¿dónde estás tú? y Adán respondió “oí tu voz en el huerto y tuve miedo, porque estaba desnudo y me escondí” y Dios le dijo: “¿Quién te enseñó que estabas desnudo? Y entonces Dios les dice: “Esto es lo que vas a tener que pagar”

Números 32:23 Más si así no lo hacéis, he aquí habréis pecado ante Jehová; y sabed que vuestro pecado os alcanzará.

El pecado siempre alcanza, ese es un principio Bíblico, y no podemos quebrar los principios de Dios, no le podemos decir “Señor en ésta vez te pido que el pecado no me alcance” ¡No! el pecado nos va alcanzar ¿amén?. El pecado va alcanzar.

Génesis 4:7 Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.

El pecado, si tu mal haces, el pecado está a la puerta.

Salmos 140:11  El hombre deslenguado no será firme en la tierra;

          El mal cazará al hombre injusto para derribarle.

El hombre injusto anda corriendo, pensando que nada lo puede detener, el hombre malo está pensando “no nada me va a pasar” Giezi dijo y empezó a pensar dentro de sí “¿qué de malo tiene? Si ya Naamán de por si nos iba a dar esta plata y estos trajes de marca. No es malo”. Y se dio cuenta de que si era muy malo. 

El hombre malo será cazado y será derribado.

Proverbios 13:21 El mal perseguirá a los pecadores,

  Mas los justos serán premiados con el bien.

¿Qué puedo hacer? El juicio vino de Dios y le dijo en Génesis 3:16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti. Tu deseo será para tu marido ¿qué quiere decir?. Que tu estarás deseando ¿por qué tengo tanto dolor? y tu ahí sonriendo como si no pasara nada, y esta fue hermana la consecuencia del pecado desde Adán y de Eva; y si alguna hermana ha dado a luz tu sabes que es ese dolor y sí échale la culpa a Eva, pero de la misma manera eso nos está recordando que el pecado nos alcanza, que trae consecuencias.

Génesis 3:17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.

Hermano, hermana; la Biblia dice que ahora en vez de que los árboles y los mangos y la fruta ya de por sí estaba ahí, ahora la tenemos que sembrar y trabajar, y dice la Biblia Génesis 3:18 Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo. 

3:19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

¿Qué puedo hacer?

Es algo muy sencillo, y digo que es muy sencillo porque Dios no me dice “¡ah! Tssssss mira, tienes que hacer, esto, esto y esto y  es una fórmula de 20, 30, 50, de 100 pasos y no todos la pueden hacer” ¡NO! 

Veamos lo que dice Isaías 1:18 Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.

Dios dice “mira, ven luego, no te esperes más tiempo, no te detengas más tiempo, no te quedes más tiempo, no juegues más tiempo. Te vas a quemar, te vas a lastimar, vas a sufrir las consecuencias, “Venid luego”. Y hermano, hermana si tu estás en algo, Dios dice “detente inmediatamente, ya no lo hagas, ahorita mismo venid, luego” dice Jehová; y ponte a cuentas con Dios, ven luego, el día de hoy, esta misma hora, este mismo minuto y ponte a cuentas con Dios, es lo que Dios pide, y Dios dice “mira, si tu vienes; lo que yo puedo hacer con mi poder. Puedo hacer que ese pecado, tan rojo y tan feo y tan negro, sea convertido en algo blanco. ¿Por qué? Porque Dios tiene poder. Dios tiene el poder que cuando el peor de los pecados y lo peor de mi vida y el peor de mis vicios, Dios lo puede arreglar y Dios lo puede sanar, ese es el poder de Dios. 

¡Oh! Has estado batallando con tu pecado y dices “es que no puedo, no lo puedo dejar, no lo puedo hacer a un lado” ¡En el nombre de Cristo si lo puedes hacer! ¡Con el poder de Dios, sí lo puedes hacer! ¡No hay nada que Dios no pueda hacer.

Y el diablo va a venir y el diablo te va a decir, no lo puedes dejar, es imposible, no puedes dejar eso, es imposible. Dile al diablo “¡Si, yo puedo!” Porque si puedes, si puedes, es el poder de Dios. 

No está en mi, porque yo no puedo, pero; Dios sí puede. Deja a Dios que te ayude, deja que la palabra de Dios te ayude, deja que el poder de Dios te ayude. 

Proverbios 28:13 El que encubre sus pecados no prosperará; ¿Cuánto tiempo ya te has llevado encubriendo y encubriendo y encubriendo y encubriendo y encubriendo tus pecados? No vas a prosperar. Por lo menos a mi no me gustaría comenzar un negocio y llevarlo a la quiebra y decir “¡wow! una semana y lo lleve a la quiebra” ¡NO! si yo comienzo un negocio, en 6 meses quiero decir “¡wow! en seis meses le invertí 10 mil y ahora ya tengo 30 mil ¡wow!” Y estoy feliz. Cuando encubres tus pecados, dice la Biblia que no vas a prosperar. Te estas arruinando cada vez más.

  Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.

Dios quiere que confieses tu pecado. Dios quiere que yo vaya delante de Él y le diga “Señor he pecado, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no soy digno de ser llamado tu hijo, perdóname porque he pecado contra ti, perdóname porque me he alejado tanto, estoy tan avergonzado y te pido perdón.” Y lo maravilloso de esto es que Dios, no nos dice “fuchila, guacatela” ahora si le dice “guacatela” a nuestro pecado, pero cuando tu vienes con un corazón contrito y humillado, bendito sea Dios que nunca nos rechaza, nunca nos pone la mano, como nosotros ¿amén?. Que pasa a veces en el hogar, el esposo se enoja con la esposa y el esposo (porque así somos nosotros) viene y le dice “sabes que mi amor, he pecado, es mi culpa, no te debí haber dicho gorda, es mi culpa” y entonces qué hace la esposa “¡alejate! no quiero hablar contigo en 20 años”. El problema es que ya después de 20 años, todavía no habla conmigo ¿amén? y le dices “oye ya pasaron 20 años” y nosotros los hombres siempre estamos pidiendo disculpas y perdón. Pero en el matrimonio se enoja uno contra el otro y hay un rechazo. En las cosas de Dios, cuando yo peco contra Dios, y vengo y me humilló y le digo a Dios “perdoname”; Dios en ningun me rechaza, en ningún momento Dios nos rechaza, Dios es más, lo único que estaba esperando era eso. ¿Qué hacía el padre del hijo pródigo? Todos los días esperando a su hijo. ¡Quizá hoy será el día! ¡Quizá hoy será el día que mi hijo va a regresar! ¡Quizá hoy será el día que mi hijo se va arrepentir! ¡Quizá hoy será el día que mi hijo se va a dar cuenta que aquí hay más bendición que estar allá perdiendo y malgastando su vida! ¡Quizá hoy será el día! Y cuando vió a su hijo venir, él corrió hacía él, y lo abrazó y lo besó; porque eso quiere Dios, que nosotros vengamos a Él y le pidamos perdón. Dios nunca nos rechaza. 

2 Crónicas 7:14 si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.

Tu tienes que decirle a Dios, “Señor he estado en éste pecado, pero yo te pido que Tu me ayudes a dejarlo de una vez por todas, yo te pido que tu me ayudes a dejar éste pecado, estoy tan arrepentido y te pido perdón, ya no lo quiero volver hacer nunca más, me arrepiento y te pido que Tu me ayudes”

Y ¿sabes lo que Dios va hacer? 

2 Crónicas 7:14 b entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. Sanaré tu vida, sanaré tu vida completamente.

La semana pasada vimos que el pueblo llegó a Mara y Dios les dijo “echa aquí este árbol y las aguas amargas y tan feas, se van a convertir en dulces” y al final dice: Yo Jehová tu sanador.  

“¡Oh! pero ya fuí aquí a triple A y no me ayuda, ya fui a triple B y no me ayuda, ya fui a triple C y no me ayuda, ya fui a triple Z y no me ayuda.” ¡Sí! porque allá afuera, lo que busque allá afuera no me va a sanar, pero ve con Dios y Él es tu sanador. 

El pecado trae consecuencias, arrepiéntete y ven a Dios y Él está listo para perdonarte.