Pasando tiempo aparte con Dios

Marcos 1:35

Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba.

Quiero hablar acerca de una de las características que tenía el Señor Jesucristo y parte de su carácter era que él se apartaba y tomaba tiempo aparte con Dios y no sólo pasaba tiempo aparte sino que a propósito se levantaba muy de mañana y para los que quizá no entienden que es muy de mañana, dice la Palabra de Dios siendo aún muy oscuro. 

Nosotros tenemos que levantarnos cuando Dios nos habla. ¿Te has levantado y aun es de madrugada y tienes dos opciones: orar y pasar tiempo con Dios o de quedarte dormido? ¿y sabes que es lo que pasa cuando Dios nos levanta para platicar con nosotros y nos vamos a dormir? lo que pasa es que en vez de pasar tiempo con Dios, lo que termina sucediendo es que nos levantamos más tarde de lo que deberíamos levantarnos.

Uno de los hábitos del Señor Jesús era tomar tiempo aparte con Dios, tenía como propósito retirarse del ruido y de las demandas cotidianas para pasar tiempo con Dios, para relacionarse con él, y recargar pilas, y si había alguien que ni siquiera tenía que orar porque él es Dios, era él pero esto lo dejó para seguir sus pisadas. Como un buen líder él no decía “hagan eso pero yo no lo voy a hacer.” Cada una de las cosas que él hizo las hizo con un propósito, para que sigamos sus pisadas. La razón de que el pasaba tiempo con Dios realmente no era para recargar pilas o fortalecerse pero él nos estaba mostrando la necesidad de orar siempre, de pasar tiempo con Dios. 

Jesús salió fuera a caminar a tomar un tiempo con Dios. ¿Que difícil es cuando estamos cargados de sueño y nos levantamos a orar y solo decimos “Padre celestial” y nos quedamos dormidos, pasa una hora y decimos que oramos una hora y que qué buenos cristianos somos y que ¿habremos orado? “pues Dios sabe”.

Debemos de buscar tiempo con Dios y cuando salimos y como el Señor Jesús salió y se fue a un lugar desierto, un lugar apartado para orar. Cuando pasamos tiempo y salimos a caminar y orar yo creo que nos podemos concentrar más, ahora podemos orar en cualquier lugar y en cualquier momento, pero Jesús sabía que para comenzar una batalla del día  tenía que pasar tiempo con Dios muy de mañana, y nosotros también debemos pasar tiempo con Dios. No podemos salir sin decirle al Señor que necesitamos pasar tiempo con él.

Dice la Biblia en Mateo 14:23 Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo.El Señor Jesucristo tenía un hábito, que era pasar tiempo aparte con Dios. Es bueno pasar tiempo aparte con Dios. Es tiempo de olvidarnos de problemas y dárselos al Señor y no creo que es tan bueno si solamente voy todos los días a Dios quejándome, diciéndole pasa esto en mi vida, tengo problemas y dificultades, es más cuando ores a Dios primero pídele perdón por tus pecados, alaba y exalta su nombre y dale gracias por todo lo que ha hecho por ti, y luego comienza a pedir por los demás, al final ya ni vas a tener tiempo para ti, no vas a tener tiempo para quejarte ni decirle todas tus aflicciones. Dios tiene cuidado de nosotros pero él quiere que pasemos tiempo con él.

Una de la características y los hábitos del Señor Jesús era que quería pasar tiempo a solas con Dios. Hay un himno que dice, ‘A solas al huerto yo voy’ y tenemos que buscar a Dios.

Hace años un pastor me invitó a un monte a un lugar a donde a él le gustaba orar y fui con él. Pasamos a un lugar, compramos codornices, subimos la montaña y hacía frío, cayó nieve esa noche, oramos y cuando no aguantamos el frío nos dormimos y a la mañana seguimos orando más.

Dice Lucas 5:16 Mas él se apartaba a lugares desiertos, y oraba. Jesús no se quedaba en casa, con los hermanos, él salí aparte y oraba. En el instituto teníamos durante la noche un tiempo de guardia y era de 11 a 2 y de 2 a 5 y cuando teníamos el tiempo de cuidar los dormitorios y de dar rondines y a mi me tocaba de 2 a 5 yo salía al parque que teníamos para checar los alrededores de los dormitorios y muchas veces vi al pastor Vineyard caminando y orando y que bendición el poder orar y apartarnos y no estoy diciendo que te vayas al desierto de Sahara o al de Sonora pero aun así podemos pasar tiempo con Dios.

Nosotros podemos aprender y apartarnos y buscar tiempo con Dios aislarnos de este mundo para orar.

Debemos de pasar un tiempo aparte con Dios para recargarnos espiritual  y emocionalmente. Dice Marcos 1:34-39Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y echó fuera muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque le conocían. Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba. Y le buscó Simón, y los que con él estaban; y hallándole, le dijeron: Todos te buscan. El les dijo: Vamos a los lugares vecinos, para que predique también allí; porque para esto he venido. Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea, y echaba fuera los demonios.De tal manera que era un tiempo de prepararse. Antes de predicar él iba a orar, antes de que nosotros nos enfrentemos a este mundo debemos ir a orar, apartarnos, tomar tiempo con Dios, buscarle a él y decirle al Señor que necesitamos de él. Jesús sanó a muchos enfermos de diversas enfermedades y el tuvo que apartarse a un lugar, recargó fuerzas, oró al Señor y continuó haciendo la obra de Dios. No sanó y se apartó y se fue a Cancún, y dijo que necesitaba un descanso muy largo. Dios no está en contra de que descansamos, dice la Palabra que él descansó el séptimo día, pero creo que muchas veces descansamos de más y descansamos de la obra de Dios y no podemos descansar de Dios porque es parte de nosotros. 

El señor Jesús tenía este hábito de aislarse momentáneamente y hablar con Dios. Jesús se iba a parte para tener una perspectiva correcta. Dice Juan 6:15 Pero entendiendo Jesús que iban a venir para apoderarse de él y hacerle rey, volvió a retirarse al monte él solo.  Jesús vino a servir y morir en esa cruz y cuando venían a hacerle rey, dice la Biblia que él se apartó a un monte él solo. El se fue a buscar a Dios y cuando quizás alguien nos está aplaudiendo mucho, se nos está subiendo mucho, como que en la obra de Dios ya hemos llegado a un punto de decir “miren todo lo que he hecho”. Como el rey Nabucodonosor en el patio diciendo, “que grandeza la mía” y Dios lo humilló. El Señor Jesucristo se fue a un lugar aparte la Biblia no dice para qué pero sabemos que él iba a orar a esos lugares y pasar tiempo con Dios. Cuando nosotros estamos en un lugar aparte y solos probemos la veracidad de nuestro cristianismo, que hacemos a solas, le estamos buscando a él, rindiéndose a su pies. El es el único rey, el que merece la honra y la gloria y si había alguien que merecía ser el rey, era el Señor Jesús, si había alguien que no merecía orar era el Señor Jesús pero él dijo que no era su tiempo ni su hora. Después un día entró a Jerusalén, en la entrada triunfal tan gloriosa y tan hermosa pero en esta ocasión no era su hora.

Tenemos que aislarnos un poquito de este mundo. Estamos tan metidos en internet, en la tecnología, en Facebook que el simple hecho de cerrar los ojos y apartarnos un poco nos morimos. Dios quiere que dejemos este mundo un momento, que dejemos  los problemas y que nos aislemos un rato. ese era el hábito de Jesús. Quizá ya te has apartado, continúa haciéndolo, busca a Dios.

Tenemos una batalla que pelear. Dice en Mateo 4:1 Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. Aun en el desierto el Señor Jesucristo fue tentado. No porque me aparte soy inmune y dice que Jesús fue llevado. ¿Cuantas veces querrá llevarme el Espíritu de Dios a orar? tenemos que responder a ese llamado y Jesús no le dijo al Espíritu que no. ¿Cuántas veces Dios nos levanta el domingo en la mañana y nos dice que vayamos a la iglesia? El Espíritu Santo lleva a Jesús al desierto y dice el versículo 2, Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.” Jesús tenía que ir y prepararse para una batalla contra el diablo y tenemos batallas que luchar por eso tenemos que doblarnos de rodillas para poder enfrentar estas batallas de pie, porque no vamos a poder enfrentarnos con tantas batallas, dice la Biblia que el diablo anda como león rugiente y creo que las batallas de hoy en día son más fuertes que las que había antes. El diablo sabe que no tiene mucho tiempo, el quiere tomar ventaja y nosotros como cristianos no deberíamos de darle ventaja, ni ceder, sino que deberíamos de pasar tiempo orando y aun ayunando. 

El diablo le dijo a Jesús, “si eres hijo de Dios di que estas piedras se conviertan en pan.” El señor Jesucristo pudo haberlo hecho. él mandó maná de la nada, ni siquiera tenía que usar esa piedras y él ganó esta batalla.

Jesús también pasó tiempo con Dios para escuchar a Dios. A veces tenemos que decirle al Señor que no sabemos que hacer, que decisión tomar y que nos diga él y debemos buscar que él nos guíe y Dios en su tiempo y su plan nos va a guiar. El Señor Jesús tomaba tiempo aparte con Dios. Nosotros también deberíamos.