EL PODER DE DIOS

Romanos 1: 8-17

1:8 Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el mundo.

1:9 Porque testigo me es Dios, a quien sirvo en mi espíritu en el evangelio de su Hijo, de que sin cesar hago mención de vosotros siempre en mis oraciones,

1:10 rogando que de alguna manera tenga al fin, por la voluntad de Dios, un próspero viaje para ir a vosotros.

1:11 Porque deseo veros, para comunicaros algún don espiritual, a fin de que seáis confirmados;

1:12 esto es, para ser mutuamente confortados por la fe que nos es común a vosotros y a mí.

1:13 Pero no quiero, hermanos, que ignoréis que muchas veces me he propuesto ir a vosotros (pero hasta ahora he sido estorbado), para tener también entre vosotros algún fruto, como entre los demás gentiles.

1:14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor.

1:15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.

1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.

1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.

Dice la palabra de Dios que Pablo les está comunicando su deseo de poder ir a Roma, en varias ocasiones él ha intentado ir a Roma pero se le ha estorbado, es como cuando nosotros queremos ir a algún viaje importante, a llevar a nuestra esposa cada año a Cancún, pero se nos ha estorbado, siempre la suegra mete la pata ¿verdad?… ¡No es cierto!

Pero aquí dice la palabra de Dios que está Pablo tratando de ir a Roma, pero por alguna razón él no ha podido y si a Pablo teniendo ese deseo de poder ir a Roma para llevarles el evangelio, era su deseo y no había podido ¿cuanto más en ocasiones, nosotros que queremos algo? y a veces no resulta y ni siquiera es para salvación de alguien más, es para nuestro beneficio; por ejemplo, hace días estábamos ya por firmar los papeles y la venta del local, y algo pasa, algo sucede, nos llaman y no dicen:

-¿sabe qué? lo vamos a posponer unos días más

Y uno dice

– ¡Señor necesitamos vender este local, necesitamos este otro lugar, necesitamos ésto!

Pero Dios sabe y tiene control de las cosas, muchas veces no somos nosotros, Dios al estar orando nosotros Dios tiene control de las cosas

Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.

Aquí hay algunas cosas que vamos a ver acerca del poder de Dios

Primero que nada Pablo explica que el evangelio, la salvación en Romanos 1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.

El evangelio es poder de Dios para salvación, la salvación misma es poder de Dios, el evangelio mismo es poder de Dios. El evangelio para salvar y la persona que escucha el evangelio al ser salva bajo el poder de Dios, puede entonces ahora tener vida eterna, y Pablo lo dice de ésta manera, dice: “a todo aquel que cree”

¿Qué tenemos nosotros que hacer para aceptar la salvación? Simplemente creer

¿Qué tenemos nosotros que hacer para que alguien acepte la salvación? Hablar, comunicar, expresarles que es lo que Cristo hizo en la cruz.

Y el poder de Dios es el evangelio, pero también, es esta salvación que Dios nos da:

1.- La Salvación es el Poder de Dios

Primeramente dice la Biblia, al judío ¿por qué al judío? dice la Biblia en Juan 1:11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. ¿quienes eran los suyos? Los judíos; y entonces después a nosotros como lo explica aquí en Romanos como un injerto, como diciendo Dios:

– Ok ustedes no quisieron, vamos a ver si alguien más quiere la salvación

Y gracias a Dios, dice Pablo, que los judíos ciertamente han rechazado para que nosotros también podamos ser salvos.

Como cuando uno de mis hijos no se quiere comer todo el arroz, y me lo da a mí y me toca parte del arroz.

Cuando nosotros predicamos el evangelio, Dios está usando su poder a través de nosotros.

2.- La Predicación es Poder de Dios

1 Corintios 1:17 Pues no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el evangelio; no con sabiduría de palabras, para que no se haga vana la cruz de Cristo.

Se estaban ahí peleando

-¿ Y tú de quién eres?

– Yo soy de este y ¿a ti quien te bautizó?

Y Pablo dice:

-¡Hey! Cristo no me envió a bautizar, aunque sí es importante, porque algunos van a tomar este versículo y decir “ah ya viste, no es importante el bautismo”

Y Dios dice hay que hacer hay que hacer esto sin dejar de hacer aquello, y hay que bautizarnos sin dejar de predicar y llevar el evangelio a toda criatura, de tal manera que Pablo dice:

-No me envió Cristo a bautizar, he bautizado a muy pocos, pero dice ahí, pero me envió Cristo a predicar el evangelio, no con sabiduría de palabras, para que no se haga vana la cruz de Cristo

¿Cuántas veces queremos nosotros usar sabiduría de palabras? (Echarle crema a nuestros tacos ) Y cuando simplemente Dios dice:

-¡Predica la palabra de Dios! ¡Habla de la palabra de Dios! Cuenta y hablales como Cristo te cambio y como Él te salvó.

No tenemos que añadirle mucho

1 Corintios 1:18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios.

Dice ahí, la palabra de Dios es locura a los que se pierden, entonces hay los que se salvan y hay los que se pierden. No quieres estar tu entre los que se pierden, quieres tú estar entre los que se salvan. ¡Yo estoy entre los que se han salvado! Y hay que hablarles a los que están perdido para que también puedan estar dentro de los que están salvos.

1 Corintios 1:18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios.

Pero a los que se salvan, es poder de Dios.

De tal manera que la predicación del evangelio es poder de Dios, el predicar el evangelio es poder de Dios y ¿qué predicamos?

1 Corintios 1:23 pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura;

¿Por qué para los judíos tropezadero? Porque ellos esperaban un mesías que nunca iba, por supuesto, juzgado, mandado a una cárcel y después morir entre malhechores ¿qué tipo de salvador es ese? Y para los judíos eso es un tropezadero, el ver al salvador, al mesías, al Cristo crucificado eso era imposible; pero era necesario que él cordero de Dios derramara su sangre y muriera en una cruz llevando todos nuestros pecados.

Y dice “ para los gentiles locura; “

Pero nuevamente nos dice en el versículo 1 Corintios 1:24 mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios.  

¿Quién es el poder de Dios? es Cristo y Cristo necesita ser predicado y Cristo necesita ser aceptado.

Esto quiere decir que la palabra de la cruz, cuando dice que la predicamos y la hablamos, Dios me está usando a mi como un instrumento de poder, no cualquier instrumento, sino un instrumento de poder, cuando estoy predicando la palabra de la cruz, cuando estoy predicando a Cristo que es poder de Dios.

3.- El testimonio de Dios es poder de Dios

1 Corintios 2:1-5

2:1 Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.

Y habla acerca de todo lo que Dios ha hecho, cuando predicaban, por ejemplo, la predicación allá en Hechos 3, la predicación de Esteban cuando habla, yendo desde Moisés, muchas veces la predicación era “yendo” y “comenzando desde Moisés”  hablando de todo lo que Dios ha hecho desde Moisés, las predicaciones no eran simplemente ¡hey acepta a Cristo! Porque el judío tenía que entender todos esos pasos, de cómo fue que Jesús llega hasta nosotros, para nosotros se nos hace más fácil porque comprendemos y vemos y sabemos que “Semana Santa” y sabemos que es “Navidad” y estamos empapados de todo lo que es de Cristo y de Dios con mucha religiosidad; pero el judío no; el judío tiene que ir desde Moisés, el judío tiene que ir a través de David, y lo que hicieron los profetas e ir a Salmos y saber quien es está entre dos malhechores y allá en Miqueas, quien nace allá en Belen de Judea, y allá en Isaias, quien es ese príncipe, ese hijo amado, el hijo de Dios, y quién es aquel sobre quien fueron puesto todos los pecados del mundo en él.

De tal manera que cuando dice la palabra de Dios 1 Corintios “el testimonio de Dios” todo lo que Dios ha hecho para traernos la salvación de Cristo

2:2 Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.

Dice la Biblia, me propuse no saber más de lo que está pasando allá en Roma, de los problemas que están sucediendo allá en Grecia, de las olimpiadas que existían, de los partidos de fútbol, de los partidos de baseball, de los partidos de box que habían, de las nuevas películas que estaban saliendo. Sino dice “no quería saber otra cosa sino de Cristo”

2:3 Y estuve entre vosotros con debilidad, y mucho temor y temblor;

2:4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder,

2:5 para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

Pablo está diciendo:

-El testimonio de Dios que he predicado, ese es el poder de Dios, para que vuestra sabiduría no esté en una sabiduría de hombres, sino que esté en el testimonio de Dios, en lo que Dios me habla desde el principio hasta el fin, y eso es la palabra de Dios. La palabra de Dios es poder de Dios. Pablo quería saber más de Dios, de la palabra de Dios, y predicarles de la palabra de Dios.

Entre más nosotros hablamos de nosotros mismos, menos del poder de Dios estamos hablando, pero entre más nosotros hablamos de la palabra de Dios, más hablamos del poder de Dios. Cuando nosotros hablamos de cómo el mar rojo se partió en dos, como salen de Egipto, como Dios ayudó al pueblo de Israel, como ellos llegaron a Jericó, como estos muros cayeron, todo eso es el poder de Dios.

Tenemos nosotros el poder de Dios en nuestras manos y Dios quiere que nosotros lo llevemos  a otras personas, no con nuestra propia sabiduría sino el poder de Dios.

4.- La Vida Eterna es Poder de Dios

1 Corintios 13:1-5

13:1 Esta es la tercera vez que voy a vosotros. Por boca de dos o de tres testigos se decidirá todo asunto.

13:2 He dicho antes, y ahora digo otra vez como si estuviera presente, y ahora ausente lo escribo a los que antes pecaron, y a todos los demás, que si voy otra vez, no seré indulgente;

13:3 pues buscáis una prueba de que habla Cristo en mí, el cual no es débil para con vosotros, sino que es poderoso en vosotros.

Los corintios como que estaban un poquito dudando de la predicación de Pablo, porque cuando andamos en carnalidad comenzamos a dudar de la palabra de Dios, y la iglesia allá en Corinto era una iglesia medio, o bien, carnal; era una iglesia carnal, tenían problemas, tenían dificultades, durante la cena del Señor había problemas, ciertas relaciones ahí, entre que el papá tenía al hijo de no sé quién, había un montón de problemas, o el hijo tenía a la esposa del papá, pero, versículo 4

13:4 Porque aunque fue crucificado (está hablando de Cristo) en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en él, pero viviremos con él por el poder de Dios para con vosotros.

Dice la Biblia, Cristo fue crucificado en debilidad, pero ahora vive, por causa del poder de Dios y nosotros de la misma manera, si es que llegamos a morir, viviremos por el poder de Dios. De tal manera que la vida eterna es poder de Dios, la única manera que nosotros podemos vivir y tener parte en esa resurrección, de la misma manera que Cristo, nosotros también, es por el poder de Dios, vamos no solamente a experimentar el poder de Dios cuando resucitemos, o vayamos junto con Él en las nubes, pero tenemos la oportunidad de predicar ese mismo poder, cada uno de nosotros. Pero dice en el versículo 5

13:5 Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?

Cristo quiere estar en cada uno de nosotros, la vida eterna es cuando nosotros tenemos a Cristo en mí.

1 Pedro 1:3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

¿Qué quiere decir renacer?

Quiere decir que ya nacimos la primera vez y

¿Cuándo volvimos a renacer?

Cuando Cristo nos salvó

De tal manera que ¿cuántas veces se nace? una vez, ¿cuántas veces se renace? una sola vez, y quien nace dos veces, muere una sola vez, y quién nace una sola vez, muere dos veces; porque quien nace una sola vez, y no ha renacido, va a morir e irse a la tumba, pero va a ir a la segunda muerte, e irse al infierno; lo que necesitamos es nacer. Así que cuando nacimos, simplemente nacimos, y cuando aceptamos a Cristo ahora renacimos.

Dice el versículo 3 “nos hizo renacer” no dice la Biblia nos ha estado continuamente haciendo renacer, porque ¿que tal que pierdes tu salvación? Entonces tienes que renacer y renacer y renacer, eso ya no es renacimiento, eso ya es un revoltijo.

1 Pedro 1:3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

1:4 para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,

Sabes hermano, hermana tenemos una mansión reservada, el pastor Gómez, estaba contando que en una ocasión ofició una boda, lo invitaron unos hermanos de la iglesia, para que oficiara la boda en un jardín, y el fue con su esposa, eran miembros de su iglesia y los casó y después de la boda, el hermano Gómez y su esposa salieron, creo que tenían sed o algo, y salieron del salón al comparar algo y cuando regresaron, había alguien en la puerta y le dijeron:

-Su nombre por favor

y él respondió

-Disculpe, ¿qué no me acaba de ver? acabo de predicar, acabo de oficiar la boda

y le dijeron

-Su nombre por favor

-Este, bueno soy el pastor Gómez

Y lo empezaron a buscar

-No, no está, su nombre por favor

-¡Ya se lo dije! Antonio Gómez

Lo buscaron

-Pues no está, y como no está, no puede entrar

 

¡Y no entraron, se quedaron afuera! A lo mejor la predicación estuvo muy dura, algo ha deber hecho el pastor Gómez (es broma), pero no tenía reservación, no estaba su nombre y no pudo entrar; hermano, hermana nosotros tenemos una reservación, asegúrate que tu nombre es el mismo que dice en tu IFE, sino no te van a dejar entrar; tienes que asegurarte que eres salvo, y cuando somos salvos tenemos una reservación en los cielos.

1:5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero.

Somos guardados mediante el poder de Dios, somos guardados por el poder de Dios, de tal manera que Dios guarda mi reservación, mi salvación, mi vida eterna bajo su poder; si la manera de yo ser salvo hubiera sido un esfuerzo de agarrar una soga y obtener la salvación, entonces quizá, como esta en mis propias fuerzas, o la puedo obtener o no la puedo obtener, o la puedo mantener o no la puedo mantener, o la puedo perder o la puedo seguir teniendo; pero como no está en mi poder, sino la salvación está en su poder, Él me guarda en el poder de Dios, siendo su hijo, el me guarda en su poder, en el poder de Dios. La vida eterna, mi vida eterna, no debo de llorar cada noche y decirle

-¿Seré salvo Señor? (llorando) ¿o me voy a ir al infierno?

¡No! Deja la salvación en sus manos, en el poder de Dios. Ahora, tienes que pedirle salvación primero, pero una vez que eres su hijo, dice la Biblia que el que tiene al hijo tiene la vida, el que no tiene al hijo no tiene la vida eterna, entonces la salvación está en las manos de Dios, mi vida eterna es guardada bajo su poder.

6.- Dios me da de su Poder para predicar

2a Timoteo 1:7

1:7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

El domingo pasado estábamos hablando allá en Santiago 3, que habla acerca de tener una buena conducta, Dios quiere que tengamos una buena conducta.

¿Cómo yo puedo tener una buena conducta? Podemos tener una buena conducta, porque su espíritu santo que está en mí, me da dominio propio, me ayuda a tener dominio propio, me ayuda a tener amor, me ayuda a tener de su poder

¿Para qué? (versículo 8)

1:8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,

Dice Pablo, mira, no te avergüences de dar testimonio, ¡sino participa, participa! y dice “vino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,” Dios quiere que participemos, y Dios me da de su poder del espíritu santo para que yo participe, ¿de qué sirve tener el poder de Dios en mi vida, sino participo? ¿si no lo uso?

¿De qué sirve un hombre fuerte en la casa, sino quiere abrir la lata de mayonesa? o de chiles jalapeños o de mermelada, o de lechera.

Entonces ¿de qué sirve tener un hombre fuerte en la casa, sino va hacer nada?

¿De qué sirve que tengamos el poder de Dios, si no lo vamos a usar? ¿De qué sirve nuestra boca, sino la vamos a usar? ¿De qué sirve que Dios me haya dejado, y ya soy salvo, sin usar de su poder?

Hechos 1:8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

Dios dice mira, cada uno de ustedes va a recibir poder de Dios y ese poder, lo vas a usar de esta manera, vas a ir, vas a testificar de mi gracia, vas a ser testigo aquí en otro lugar, en más allá y hasta lo último de la tierra, necesitamos el poder de Dios. El tema de la conferencia es “Buscando el Poder de Dios”. Y el poder de Dios en nuestras vidas es y sirve de muchas formas y de muchas maneras, pero una de ellas, es para que nosotros prediquemos el evangelio.

El evangelio es poder de Dios, cuando lo predicó, cuando la gente lo escucha, cuando la gente es salva, cuando la gente es guardada en sus manos de Él, y cuando yo voy y participo  y me doy cuenta que Dios me da de su poder. Usemos bien este poder, para participar y le dice Pablo a Timoteo mira participa de las aflicciones, porque cuando un misionero llega a un nuevo país, no le llevan guirnaldas, le dan una casa gratis, le dan un megáfono, aplausos y le dicen:

-¡eh! ya llegó el misionero.

¡No! hay aflicciones, pero Dios quiere que prediquemos, aun cuando hay aflicciones.

-Pastor es que no voy a ir a predicar, porque hay mucha aflicción.

Eso mismo dijo Pablo ¡estas en lo correcto!

-Pastor no vaya a ir a predicar porque hace mucho calor

No es mucha aflicción, pero ¡sí, estas en lo correcto!

-Pastor no voy a ir a predicar, porque la otra vez me regañó un señor y fue aflicción a mi vida

¡Estas en lo correcto! Hay algo de aflicción

-Pastor no voy a ir a predicar porque un día me machuque los dedos

Hubo aflicción ¡muy bien! pero hay que ir a preciar, porque es poder de Dios.

¡Hay que predicar su palabra, buscar el poder de Dios! y decirle al Señor

-¡Señor yo quiero usar este poder para llevar muchos a tus pies!