Vuelve Tu Corazón A Dios

Misionero Pedro Saucedo

Testimonio:

Yo fui salvo a la edad de diez años, mis padres fueron originarios del área de la laguna como se le conoce allá en las afueras de Torreón Coahuila, en el año setenta mis padres me enviaron para ciudad Juárez y estando allá un pastor del área fue a visitar a los vecinos de mis papás y los vecinos no tuvieron intención de recibirle y le dijeron: porque no va con los vecinos y doy gracias a Dios porque el pastor hizo caso fue a visitar a mis papás y después de una, dos, tres visitas el pastor gana a mis papás y mi padre se convirtió al señor con tanto amor, con tanto celo que el pidió al pastor porque no lleva a su casa a tener cultos, mi padre abrió su casa para que ahí se predicara la palabra de Dios y recuerdo que mi madre barría el patio, ponía unas pequeñas bancas de botes con tablas y luego me decía a mí: ve avísale a los vecinos diles que ya mero comenzamos el culto y yo recuerdo ir y avisar a los vecinos decirles ya ya mero comenzamos el culto y eso era cada vez que sea tenia el culto en uno de esos cultos Dios toco mi corazón en la invitación de uno de los mensajes yo levante mi mano para ser misionero para Cristo, fui salvo a esa edad.

A la edad de dieciséis años el señor me llamó al ministerio y fui al instituto del pastor Ochoa y ahora él está ahí pero antes estaba el pastor Quintaron fui ahí para estudiar por tres años y después de terminar conozco a mi esposa y nos casamos y pudimos estar en diferentes parte aquí en el país predicando, levantando obras, estuvimos en Tamaulipas en San Luis potosí, en Jalisco y el ultimo lugar donde estuvimos fue en Ciudad Juárez Chihuahua, ahí en Juárez levantamos esta iglesia Bautista Juicio de Paz de la cual salimos y venimos para el estado de Zacatecas donde Dios nos llamo para comenzar una nueva obra, estamos ahí en la pequeña ciudad de calera en medio de la ciudad de Fresnillo y Zacatecas, si usted va de aquí para el norte va para el paso Juárez por ahí pasa pequeña ciudad de Calera.

Dios nos llamo ahí tenemos ahí seis años, hemos levantado una obra ahí, está el terreno, esta el lugar para los cultos, ahí un grupo de hermanos ahí; estamos predicando la palabra de Dios, ahí no hay ninguna iglesia Bautista esta es la primera en toda esa área la primera Iglesia bautista fundamental,hay más pueblos alrededor de esa ciudad que no hay ninguna Iglesia bautista y no hay ningún misionero, estamos llegando a los pueblos al rededor, hemos tocado puertas, hemos repartido folletos, hemos tratado de llevar el evangelio a la gente.

El estado de Zacatecas es un estado también muy religioso, muy fanático; tiene dos cualidades ahí, la gente es noble da el paso, ayuda; pero la otra cualidad echar a perder la primera la gente es bien mentirosa bien mentirosa acá hay no hay gente mentirosa más allá en Zacatecas y cuando mi esposa y yo íbamos a visitar  y ganar almas y la gente dice: si que pase por mí, yo voy, si voy y llegamos a la casa y esposa y yo bien emocionados. llegamos el domingo así la ruta llegábamos vacíos todas las cortinas cerradas, las puertas con doble llave ¡bien mentirosa la gente! después dijimos no nos vamos a emocionar hasta que los veamos llegar al servicio ahí vamos a emocionarnos y decir que bendición que ya esta aquí pero así es la gente allá, pero Dios aun no has dado un grupo de hermanos y hemos estado orando a Dios ya es el tiempo de salir son seis años, Dios a puesto en mi corazón ahora ir a la ciudad de Durango.

La ciudad de Durango es una ciudad casi un millón de habitantes solamente con cinco iglesias bautistas, nada mas cinco iglesias bautistas para un millón de habitantes, Dios a puesto en mi corazón he ir allá ahora a Durango para trabajar, levantar nuevas obras ahí, estamos acá para pedirle sus oraciones que Dios nos pueda ayudar para seguir levantando obras y seguir predicando el evangelio a la gente que tanto lo necesita. les pido su oración para que Dios provee el soporte suficiente para poder llegar ahora un lugar nuevo y poder comenzar una nueva obra.

Proverbios 23:26

Dame, hijo mío, tu corazón,

Y miren tus ojos por mis caminos.

En nuestro caminar como cristianos lamentablemente de alguna manera viviendo en un mundo lleno de maldad; de pecado, de cosas de satanás de alguna manera nuestro corazón es desviado, caminamos los días, las semanas tratando de vivir para Dios, tratando de mantener una vida cristiana; tratando de estar involucrados en las cosas de Dios pero de alguna manera el correr de los años el corazón de muchos es desviado de Dios, lamentablemente el corazón de algunos es apartado del caminar con Dios y las palabras de el sabio Salomón aquí dadas por Dios dice:  Dame, hijo mío, tu corazón; Dios está hablando aquí a su pueblo; no esta hablando al mundo, no esta hablando a la gente in conversa pero esta hablando a su pueblo: Dame, hijo mío, tu corazón; una de las cosas que Dios está hablándonos cada día es: Dame, hijo mío, tu corazón; Dios quiere mantener en sus manos nuestro corazón porque el sabe los peligros y los riesgos que pasamos aquí en esta vida; el sabe como el diablo tan astuta mente viene a nuestra vida para tratar de desviar nuestro corazón de Dios y el señor está diciéndonos cada instante: Dame, hijo mío, tu corazón;.

Muchas veces vinimos a la Iglesia estamos aquí haciendo cosas pero lo hacemos con un corazón no tan entregado, no tan puesto en la mano de Dios y muchas veces hacemos las cosas más por compromiso, más por rutina, más porque ya es una costumbre pero nuestro corazón está tan desviado de Dios y como hace falta volver nuestro corazón a Dios, dice la biblia en 1° Samuel 16:7, “Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.” Dios presta atención especial a nuestro corazón; no solamente nuestra mente, no solamente lo que pensamos, pero lo que nosotros ponemos en el corazón.

El corazón es una área importante para Dios, el corazón es el área en donde pedimos a Dios de la manera de Dios o de la manera del mundo, es el área en donde Dios quiere poner su presencia, es el área donde Dios quiere tomar, el corazón es el lugar que Dios quiere tener siempre en sus manos porque sabe ¡sabe! lo que es el corazón, el profeta decía: el corazón es perverso es malo ¿quien lo conocerá? Dios sabe que en el corazón es un área donde se esconden muchas cosas, que dice el señor del corazón el dice que del corazón salen los malos pensamientos los hurtos, los adulterios, los fornicaciones el dice que de ahí salen los malos pensamientos, dice la biblia en Mateo 15:19-20, “Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.

20 Estas cosas son las que contaminan al hombre; pero el comer con las manos sin lavar no contamina al hombre.

Dice Dios del corazón salen los malos pensamientos una de las razones porque el quiere tener nuestro corazón es porque de ahí ¡de ahí! si no se pone en Dios y si el corazón no esta bajo el control de Dios; lo que va a salir del corazón va a hacer cosa mala, malos pensamientos, malas acciones, fornicaciones tanta cosa mala y perversa porque Dios lo sabe, por eso dice: Dame, hijo mío, tu corazón; Dame, un verso mas que quiero darle antes de darle algunos aspectos y cosas en las que tenemos que volver nuestro corazón a Dios, dice la biblia en Joel 2:13, “Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo.”.

Dice la primera parte: Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos.

Porque Dios nos habla así; porque Dios va dirigido al corazón porque el conoce el corazón del hombre, porque el sabe el corazón del hombre, porque el sabe lo que esto está, lo que hay ahí, necesitamos volver el corazón a Dios por estas razones.

I.- Volver al fuego de Dios.

Dios no puede bendecir nuestra vida; ni puede usarnos si nuestro corazón no va devuelta a Dios; Dios no puede hacer lo que él quisiera hacer en la Iglesia si el corazón de la Iglesia no esta en la dirección correcta y no vuelve a Dios y no vuelve a hacer enfocado a Dios, si no vuelve a ser enfocado a servir a Dios, si el corazón del cristiano no esta enfocado a ser a la manera de Dios la primera cosa que debemos de volver a Dios es al fuego de Dios, nuestro corazón necesita regresar, volver al fuego de Dios, dice la biblia en 2° Timoteo 1:6, “ Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.” El apóstol Pablo hablando aquí a Timoteo le da un consejo muy importante le dice: avives el fuego del don de Dios que está en ti, una de las cosas a la cual tenemos que volver nuestro corazón a Dios es a ese fuego de Dios.

Como hace falta que nuestro corazón vuelva a tener la presencia de Dios, como hace falta que dejemos de estar fríos, como hace falta que en verdad nos entusiasmamos una vez más a Dios que volvamos sentir su presencia; como hace falta que rompamos ese hielo de esa vida espiritual y nos pongamos en verdad de hacer las cosas de Dios con ese fuego de Dios, la iglesia necesita levantarse con el fuego de Dios; el cristiano necesita servir con el fuego de Dios, no con el fuego del mundo, no a la manera del mundo pero a la manera de Dios, Pablo dice a Timoteo: aviva el fuego, aviva el fuego Timoteo ¡avivate! busca más la presencia de Dios en tu vida; pon más  de su presencia en tu vida, pon más del poder de Dios en tu vida, Timoteo cambia ese orden y ve a la iglesia con ánimo, has las cosas de Dios con ánimo, sirve a Dios con ese animo que he de caracterizar un siervo y aun cristiano.

Hoy en día estamos viviendo en tiempos difíciles donde hay mucha apatía en la iglesia, hay mucha indiferencia, hay mucha frialdad; como hace falta que volvamos nuestro corazón una vez más al fuego de Dios, que dejemos que Dios nos levante, que dejemos que Dios trabaje, que nos  hablemos a nosotros mismos digamos: que esta pasando, que estas haciendo, vamos busca más su presencia, lamentablemente muchos están en la iglesia están fríos parece una paleta y piensa todo esta bien y muchos dicen: no me pasa nada esta bien, vienes a la iglesia y no haces nada y vienes aquí y cantas con una indiferencia, cantas con una frialdad y no pasa nada en tu vida, algo esta pasando ¡algo esta pasando! dice Pablo: aviva el fuego ¡aviva el fuego! somos responsables de la manera en como estamos sirviendo a Dios; somos responsables de la manera como venimos a Dios; somos responsables si no estamos de la manera de Dios y Dios dice: aviva el fuego ¡aviva el fuego de Dios!.

Dios nos busca, Dios nos quiere, Dios quiere más de nuestra vida, Dios quiere más, pero si no venimos y decimos: señor aquí está mi corazón; cada cristiano debería decirle a Dios: Aquí está mi vida, aquí está mi corazón, Dios toma mi corazón, Dios habla mi corazón; Dios anímame, avivame yo creo que la cosa sería diferente si viniéramos a Dios buscando por su fuego, buscando por su presencia, buscando porque él haga más en nuestra vida por dejar que el tome más control con nuestra vida; como hace falta volver el corazón el fuego de Dios.

II.- Escuchar la voz de Dios

Dice la biblia en Isaías 55:3, “Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.” la siguiente cosa que tenemos que volver nuestro corazón es a escuchar la voz de Dios, a oírle volver a él a escuchar a buscar que nos hable dice: Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; venimos pero no la escuchamos; estamos aquí pero como nos confundimos y no estamos seguros si es Dios o quien es porque nuestro corazón está tan apartado de escucha su voz, como hace falta volver a oírle a prestar atención a lo que el habla, a venir decirle a Dios: habla a mi corazón como Samuel dijera Dios habla que tu siervo oye.

Que nuestro corazón vuelva a ser sensible a Dios a su voz y decir: Dios háblame cada cristiano viniera a la iglesia venir ya preparado habiendo dicho: señor habla mi corazón; Dios voy al servicio, voy a la iglesia háblame necesito que me hables quiero escucharte, quiero oírte Dios pero que triste que venimos y estamos aquí como un tiempo de rutina, como algo tan normal, como algo tan diferente y nos vamos a nuestra casa y no pasa nada no sucede nada y cuanto tiempo ya pasa que no ha pasado nada en nuestra vida porque no hemos abierto el corazón y decirle: Dios habla mi corazón ¡habla mi corazón!  vivimos un tiempo muy difíciles donde no podemos estar teniendo oídos sordos a la voz de Dios necesitamos escuchar su voz; necesitamos oírlo a él; el diablo viene a su oído a susurrarle decirle: no lo hagas, no vas a la iglesia, no sirvas, no ganes almas; el diablo viene a mentirle a decirle un montón de cosas y tristemente muchos escuchan más de lo que el diablo le dice que lo que Dios le dice y mucha gente se va de la iglesia y se aparta y apartan su corazón porque ya no le interesó escuchar a Dios; ya no vio importante lo que Dios le decía ya vio importante lo que Dios le hablaba ya comenzó apartar su oído y empezó a oír otra cosa y otra gente en lugar de Dios.

Como hace falta volver nuestro corazón a escuchar de nuevo su bendita voz; su bendito mensaje; su bendita palabra que Dios nos edifique; que Dios nos levante; que Dios nos de su fuerza; Dios tu tienes razón; Dios aquí estoy sígueme hablando; háblame que te necesito como hace falta que Dios hable nuestro hogar; como hace falta que Dios hable a nuestra familia; como hace falta que Dios hable a nuestros hijos; como hace falta que Dios hable y que cada cristiano y cada uno escuche y disponga su corazón de lo que Dios le va a hablar  no estamos tan llenos que no estamos oyendo ya lo que Dios nos está diciendo; necesitamos volver nuestro corazón a escuchar la voz de Dios.

III.- Necesitamos volver nuestro corazón al primer amor

Dice la biblia en Apocalipsis 2:2-5, “Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos;

3 y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado.

4 Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.

5 Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido.

Dios está hablando a la Iglesia de Efeso reconociendo le su trabajo y todo lo que hacía pero a la vez lo llamó la atención dijo: pero sabes que entre todo lo que tu haces hay una cosa que es grave, hay una cosa que es mala, hay una cosa que no puedo pasar por alto es que has dejado tu primer amor ¡haz dejado tu primer amor! ya no me amas como al principio me amabas, ya no me sirves, ya no los haces las cosas como las hacías antes al principio; ya le haces porque ya lo aprendiste pero ya no tienes corazón; ya no lo haces con ese amor como me amabas al principio, como hemos apartado nuestro corazón de ese primer amor a Dios. Dios dice amaras al señor con todo tu corazón, con todo tu alma, con toda tu fuerza, con todo tu ser ¡con todo! pero ya no lo estamos haciendo así ya amamos al mundo, amamos más otras cosas que a Dios y ya no venimos en la forma de Dios; ya no le amamos como lo hacíamos al principio, al principio estábamos tan entusiasmados.

-Hay un hermano ahí nuevo en Calera le regale una biblia y dice: pastor nunca me habían regalado un regalo tan grande como este; lo agarra la biblia; el la lleva cada culto; el la saca para leerla; él está ahí con ella (la biblia); el no falta a los cultos, el esta tan entusiasmado con Dios, esta en su primer amor pero tristemente muchos en el caminar se han enfriado, muchos en su caminar a través del tiempo han apartado su corazón de ese entusiasmo con Dios, de ese ánimo con Dios, de esa forma tan grande que tenían con Dios, ya no estaban igual que antes y Dios dice: has dejado tu primer amor.

Necesitamos volver a ese primer amor con Dios, donde le veíamos y estábamos tan animados con el, donde nuestros ojos estaban nada más con el; no estaban con el mundo pero ahora están con el mundo, miramos solo su palabra, miramos solo la iglesia, queremos apoyar, queremos salir a visitar ¡tantas cosas estamos dispuestos por hacer! ahora lamentablemente ya no lo hacemos igual; ya lo hacemos con una frialdad, ya le decimos Dios: si te parece bien y si no también, no puedo ir, es la próxima ves y ahí estamos en una forma tan indiferente con Dios ¡necesitamos volver nuestro corazón al primer amor con Dios!.

 

Dice la biblia Filipenses 2:5-8, “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,

6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,

7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;

8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.”, el apóstol Pablo esta aquí diciendo: “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús” y en los textos siguientes nos habla de como Jesús dejó su gloria, como el vino a la tierra aquí; como se despojo y tomo forma de Sion, nos está hablando de su muerte y crucifixión; nos está hablando de un salvador, necesitamos volver nuestro corazón a sacrificio de Cristo, que bendición que nosotros tenemos un salvador, el mundo no tiene un salvador tiene una idea vaga de un salvador pero no es el salvador de la biblia, no es el bendito salvador, no es Cristo Jesús, tiene una imagen, tienen un hombre, un individuo pero no es Cristo su salvador, como hace falta llevarle al mundo el salvador que en verdad les salva.

Necesitamos volver nuestro corazón a el, hace mas de dos mil años que nuestro Jesús vino a esta tierra el entrego su cuerpo, el murió en la cruz, el fue maltratado dice Mateo: que él fue golpeado en su rostro cuando acababan de sentenciar lo y según los religiosos dice que la gente se lanzó contra Jesús y le golpeo en la cara en el rostro, dice Isaías: que el rostro de Jesús quedó desfigurado; estaba hinchado sus ojos apenas podía ver, había un dolor tremendo en su rostro por tanto golpe que le dieron, su cuerpo fue azotado un tipo de azote que traía un tipo de púa que rasgaba su cuerpo, cuando pegaba el cuerpo traía consigo pequeños trozos de carne, bajo sus pies había un charco de sangre; estaba agonizando, estaba siendo maltratado, estaba siendo azotado cruelmente y luego lo llevan para cargar la cruz un peso aproximado de cincuenta kilos sobre su hombro con la carne viva y luego le clavan en la cruz.

El murió literalmente destrozado estaba ahí sufriendo por usted y por mi cada golpe, cada azote, cada clavo lo estuvo soportando pensando en usted y en mi para ser nuestro bendito salvador, pero ya lo olvidamos; pero ya no nos acordamos de él, pero ya no lo tenemos en nuestras vidas, pero ya no lo tomamos en cuenta, pero ya no lo hablamos, ya no lo testificamos ¡ya no lo presentamos al amigo! no lo presentamos al pariente, ya no le decimos yo tengo un salvador ¡necesitamos volver nuestro corazón a él ¡él!; nuestro salvador el cristo crucificado por nuestras almas, cada día no importa que se le olvide pero que no se le olvide que tiene un salvador, no importa que se le olvide la pastilla cualquier cosa pero que nunca olvide que alguien murió por usted ahí estuvo en la cruz sufriendo cruelmente para darlo usted una esperanza de vida eterna.

Que bendición que tenemos un bendito salvador pero no podemos olvidarlo tenemos que regresar a el, tenemos que volver nuestro corazón a él decirle: señor gracias con que puedo pagarte pero aquí está mi vida; pero aquí esta mi corazón Dios lo entrego a ti para que tu la uses ¡Dios! no nada más en agradecimiento por haber muerto por mi y haberme dado una salvación que no tenía antes gracias al señor, gracias a él que nuestra alma no va al infierno; tenemos salvación del infierno un infierno real al cual íbamos sin esperanza, sin Dios cayendo allí pero vino nuestro salvador pero un día fuimos alcanzados por él; pero un día nos hablaron de él; pero un día nos dijeron lo que él hizo por nosotros y nos arrepentimos y nos convertimos pero ya lo olvidamos, pero ya vivimos sin él; pero ya hacemos todo con un pensamiento humano; con un esfuerzo humano; con una forma humana pero ya no esta su fuerza, no esta su poder dijo Pablo: Cristo es poder para salvación a todo aquel que cree, él es el poder, el es la fortaleza, él es la guía, el es todo para nuestra vida, el es todo para nuestra casa, es todo para nuestra familia sin el no estuviéramos ahora ni tuviéramos a Cristo.

No nos olvidemos de nuestro bendito salvador y vuelva su corazón a él ¡gracias a Dios por lo que hemos tenido! pero no lo olvidemos y no hagamos a la manera del hombre; pero hagamos a la manera de Dios, Dios nos ayude a volvernos nuestro corazón a Dios.

  • Dios no puede bendecir nuestra vida; ni puede usarnos si nuestro corazón no va devuelta a Dios.
  • Oírle volver a él a escuchar a buscar que nos hable.
  • Necesitamos volver a ese primer amor con Dios.
  • No nos olvidemos de nuestro bendito salvador