Nuestro Gran Dios: Autosuficiente

Hechos 17:16-27

16 “Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría.

17 Así que discutía en la sinagoga con los judíos y piadosos, y en la plaza cada día con los que concurrían.

18 Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección.

19 Y tomándole, le trajeron al Areópago, diciendo: ¿Podremos saber qué es esta nueva enseñanza de que hablas?

20 Pues traes a nuestros oídos cosas extrañas. Queremos, pues, saber qué quiere decir esto.

21 (Porque todos los atenienses y los extranjeros residentes allí, en ninguna otra cosa se interesaban sino en decir o en oír algo nuevo.)

22 Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones atenienses, en todo observo que sois muy religiosos;

23 porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio.

24 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas,

25 ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas.

26 Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación;

27 para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.”

Hace años atrás, en un avión, el famoso campeón de boxeo Muhammad Ali, estaba viajando. Él fue un hombre de mucho orgullo, era muy intimidante y él en el avión no tenía su cinturón y la azafata le dijo que se abrocha  su cinturón y él con su orgullo respondió: Superman no necesita abrochar su cinturón y ella con mucha sabiduría respondió: “Superman tampoco necesita un avión, abroche su cinturón.”

Hasta Muhammad Ali en sus últimos años cuando le dio la enfermedad, se dio cuenta que un hombre atleta, famoso y rico, al final de cuentas es un hombre no autosuficiente, sino dependiente de otros para tener su existir. 

Para vivir y existir, tú dependes de cosas externas. Un ser humano no dura más de tres o cuatro minutos sin aire o va a morir; no durará más de tres o cuatro días sin agua o líquido para poder continuar viviendo.  

La persona más atlética, más rica, más educada, más saludable, más joven, o más musculoso, no depende de sí mismo para existir sino depende de Dios. Lo sepas o no, no eres autosuficiente

La vida es un círculo. El hombre nace sin pelo, sin dientes y en pañales y en ochenta años después, sin pelo, sin dientes y en pañales, dependiendo desde bebé que alguien le cuide y llegando a los ochenta o noventa dependiendo que otros le cuide. Pero, tengo buenas noticias: Dios no es así. Él no depende de nada ni de nadie para mantenerse vivo. Nuestro Dios no es el Yo necesito, sino el YO SOY. Él determina, él dice, él decreta y así es. 

Lo que quiero decir es que Dios es todo suficiente. Dios usa hombres y mujeres, pero Dios no necesita hombres y mujeres. Nadie en este mundo es necesario, solamente Dios. Él es auto suficiente. 

Si eres una persona devota y religiosa, y piensas que vas a ser salvo con asistir a tu iglesia, con persignarse, o haciendo un sacramento como que Dios necesitara algo, o poniendo comida al pie de un santo, Dios no te pide tu ayuda, él es suficiente para salvar. Cristo no dijo ayúdame, sino consumado es. Él es todo suficiente para salvar.

Si eres alguien que económicamente has salido de una condición de pobreza, quizás, estudiaste en una universidad de renombre y ya tienes tu propio casa y tu propio coche, ya tienes tu oficina en el piso número diez y te miras en el espejo como alguien que ya sabe hacer todo; repito, naciste sin pelo, sin dientes y pañales y algún día, por más que pienses que eres muy fuerte, vas a estar sin dientes y sin pelo y en pañales y eventualmente no importa que tanto éxito económico o en la sociedad tengas, eventualmente vas a necesitar de Dios.

O quizás eres un cristiano que llegaste a la iglesia sabiendo tu mala condición y el Señor en su gracia te perdonó y empezaste a leer la Biblia, cambió tu forma de vestir y todo eso es bueno, pero ay de nosotros que llegamos a un punto muy triste en que vengamos y todo es “ya sé eso” y solo es una rutina religiosa. Somos bautistas independientes, independientes del hombre, pero dependientes de Dios. No seamos competentes por nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios y si eres un cristiano orgulloso, supuestamente maduro, muy teológico, que ya no ora, ni lee la Biblia como antes, estás lejos de tu primer amor, quiero decirte que el Dios autosuficiente sabe introducir debilidades, enfermedades y problemas en tu vida para que de rodillas te encuentres de nuevo y no hay nada vergonzoso de eso. Que Dios nos ayude a ver su autosuficiencia

1. Dios es infinitamente superior a todos los ídolos 

En Hechos 17:22 es en donde vamos a tomar la historia. Pablo era un apóstol y él entró con una sabiduría en Atenas que era extraña para ellos; y él observó que ellos tenían un santo para todos los días, un ídolo para todos los días y el corazón de Pablo se enardecía y dice la Biblia: Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones atenienses, en todo observo que sois muy religiosos;y no les dice felicidades porque mezclado con su religión era mucha ignorancia con el Dios verdadero. porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio. Los griegos tenían a Sócrates, Aristóteles, Platón y Demócrates y Demócrates era un filósofo que nos dio el sistema de democracia. Los griegos eran bien avanzados en ciencia y tecnología en sus días, pero en cuestión de la ciencia más importante, eran absurdamente escasos, no conocían al Dios verdadero. De hecho lo admitieron: “AL DIOS NO CONOCIDO.” y Pablo dijo: “Quiero introducirlos, él no necesita nada, él no depende de ustedes” y mira lo que hay que entender, es el relato aquí entre él y ellos. Dice el versículo 24 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas,Los atenienses tenían un gran error que también está muy presente en México. Ponen a los santos dentro de algo porque hay tiempo de lluvia, viene el viento y la puede dañar y si los dejas fuera de un templo, se van a destrozar, ellos tenían sus altares cubiertos de vidrio y piedra y el ídolo dentro y él está diciendo: Nuestro Dios no necesita ningún templo, él está en todas partes. 

Yo necesito de una casa, no voy a durar mucho tiempo bajo las nubes en las noches, es agradable tener un templo, pero nuestro Dios no necesita cobertura, no depende de otras cosas para ser el Dios que es y ve lo que dice a continuación ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Los atenienses tenían una mala costumbre como está muy presente en muchos lugares de México, que ellos pensando que su dios necesitaba comida, preparaban un pozole y ese lugar en Atenas estaba lleno de comidas que se iban pudriendo porque ellos tenían un concepto de que su dios necesitaba comida. 

Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación;Está haciendo un contraste entre el Dios verdadero y los ídolos hecho por los hombres. El hombre decide cuándo lo va a fabricar y después dónde lo va a poner.  Y Pablo está diciendo: No, es cuando tu decides, sino que Dios es el que decidió cuando tú ibas a nacer y él también decidió el dónde. Tú no pones a Dios en su lugar, sino él te puso en tu lugar para que al final de todo, le busques.

Y no es para discutir religión, sino que tienes una comezón de corazón que yo también tuve en mi depresión. Yo vengo de una familia polaca y bien orgullosa de que Juan Pablo II fue el primer papa polaco de toda la historia. Yo tenía religión,  estudios, padres con carreras pero algo enardecía en mí, pero en 1995 un hombre me dio el evangelio ¿por accidente? No, por cita divina.

Tú no eres su salvador, él es tu salvador, tú no determinas el dónde y cuándo de Dios, pero él determinó eso de ti y bendito sea Dios que nuestro Dios está vivo y él no depende de nada ni de nadie para su existir.

Dice Hechos 17:28 Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.

Hay gente tan errada alrededor del mundo y en México que piensan que necesitan hacer a su dios un favor cargándole. Tu Dios no es necesitado, no necesita que le cargues, no necesita que le dejes flores y alimentos, él venció la tumba, no depende de nosotros, pero si dependemos de él. 

Gracias a Dios nos ha liberado de la oscuridad para anunciar un Dios vivo y verdadero. Que Dios convierta a las personas para que se vuelvan de los ídolos al Dios vivo y verdadero.

Dios es superior a todos los ídolos. Tú no le cargas, él te carga a ti.

2. Dios es superior a toda la creación, especialmente a los seres humanos

Salmos 145:15-16 dice: “Los ojos de todos esperan en ti, Y tú les das su comida a su tiempo. Abres tu mano, Y colmas de bendición a todo ser viviente.” Esto está diciendo que Dios es superior a todos los ídolos, pero también a todo ser humano, nosotros dependemos de él, no él de nosotros y él nos da nuestro sustento a su tiempo. 

Toda la creación confía y depende de su creador. Nuestro Creador hizo el cielo y la tierra y la sostiene con su poderosa mano. Yo no veo en ninguna parte de la Biblia que Dios hizo los cielos y la tierra porque estaba triste y solo; Dios hizo todo para su honra y gloria, pero él no depende de la tierra como nosotros.

Piensa por un segundo. Hay un hombre agricultor y fuera de sus casa hay unas hectáreas  hay hay algo de zacate y él tiene unas vacas, porque el hombre depende de la vaca, y el zacate depende de la lluvia y el sol para vivir; y los insectos y pájaros dependen del zacate y gusanos para comer y la vaca depende del zacate y el agricultor depende de la vaca, la ordeña y la mata y disfruta de una carne asada, es una cadena de dependencia, y cuando el agricultor muere los gusanos lo comen, todo es dependencia. 

Todos dependemos de él. En el momento que Él quite su mano, estamos en problemas

3. Dios no necesita nada

a. No necesita alimentos

Salmos 50:7-12 dice: “Oye, pueblo mío, y hablaré; Escucha, Israel, y testificaré contra ti: Yo soy Dios, el Dios tuyo. No te reprenderé por tus sacrificios, Ni por tus holocaustos, que están continuamente delante de mí.” Hubo gente que tenía un sistema religioso que al principio empezó bien, pero con el tiempo tenía la mentalidad de pecar toda la semana para luego ofrecer a Dios el becerro  y pensaba que le iba a agradar con él. “No tomaré de tu casa becerros, Ni machos cabríos de tus apriscos.  Porque mía es toda bestia del bosque, Y los millares de animales en los collados. Conozco a todas las aves de los montes, Y todo lo que se mueve en los campos me pertenece. Si yo tuviese hambre, no te lo diría a ti; Porque mío es el mundo y su plenitud.” 

Dios no hizo los mares porque tuviera sed; no hizo los becerro porque él necesitara una carne asada; Dios nunca ha necesitado nada, una práctica constante de gente pagana, de gente yéndose al infierno, porque la Biblia dice que todos los idólatras tendrán su lugar en el lago que arde con fuego y azufre que es la muerte segunda. Una cosa de los idólatras es que llevan comida a sus ídolos y qué triste si adoras a la “santa muerte” que triste que tienes una veneración a una estatua de muerte, pero bienvenido al templo del Dios verdadero, el Dios no de muerte, sino de vida que no necesita nada de ti, sino que él te ofrece a través de su Hijo, el pan vivo para tu alma.

b. No necesita almohada

El Señor no descansa. Él se pone a sí mismo con la responsabilidad de ser tu cuidador. Dice Salmos 121:1-5 “Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová,Que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero,Ni se dormirá el que te guarda. He aquí, no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel. Jehová es tu guardador;Jehová es tu sombra a tu mano derecha.”

No sé de ti, pero yo ya que voy saliendo de los treinta y ya estoy en los cuarenta nunca duermo bien porque tengo a mi hijo Hudson, es una bendición, pero me quita sueño y siento algo raro a los 43 años: Me levanto cansado. Necesitamos descansar siete u ocho horas, pero nuestro Dios descansó el día séptimo, pero no por cansancio, sino porque estaba contento con el paisaje que había pintado, como ese pintor que estuvo contento con su obra maestra; pero, tenlo por cierto, él no hizo el sábado para él sino para nosotros. Necesitamos un día entre siete para descansar, pero mientras que tú perteneces a Dios y cierras los ojos, puedes tener la promesa de Dios que te está guardando.

c. No necesita avisos

Isaías 40:12-13 dice: “¿Quién midió las aguas con el hueco de su mano y los cielos con su palmo, con tres dedos juntó el polvo de la tierra, y pesó los montes con balanza y con pesas los collados? ¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová, o le aconsejó enseñándole?”

Nosotros no somos Dios, necesitamos enseñanzas, nacimos necesitando que alguien nos oriente, que alguien nos dirija, buscamos maestros; hasta los mismos reyes que supuestamente eran soberanos tenían consejeros, pero hay un soberano celestial que no pide consejo. 

Y si quizás, tienes años en el evangelio y ya no lees tu Biblia como antes, como necesitado sino como un ejercicio académico, déjame decirte que la Biblia no es un libro académico, es un libro para instruir tu vida. Dios es el único que no necesita consejo, pero tú y yo si, necesitamos que alguien oriente y cualquier persona que se ponga en el lugar de Dios ay de él.

Aplicaciones

1. Aprecia la humildad de Cristo, nuestro Dios encarnado

Nuestro Señor Jesucristo ya existía sin que nadie lo hiciera. Él es el Alfa y Omega, él nació de una virgen, pero no perdió su deidad y Cristo en su misericordia, nació en un pesebre donde él llegó a ser un bebé totalmente dependiente de su mamá y José,  él sí comió y él sí tomó agua y él, en la cruz del calvario llegó a gritar delante del padre como representante de todos los necesitados: Tengo sed; pero Cristo no siempre tuvo esa naturaleza, Cristo se humilló para conseguir esa naturaleza para que en un solo sacrificio alguien divino y alguien humano pudiera unir el divino Dios y el débil humano con un sacrificio. Él se puso un manto débil de humanidad, pero no a fuerzas, sino por amor a ti.

2. Dios no te necesita, pero tú si necesitas de él.

Yo veo que el mexicano es muy trabajador, pero no te engañes pensando que ya sabes generar mil pesos al día y todo lo de tu vida lo tienes en control y orden. Dios no está buscando fuertes, sino débiles para fortalecer.

Estos meses han sido muy incómodos, muy llenos de lágrimas y donde el Señor me ha aplastado nuevamente, enseñándome que yo no soy nada  y diciendo: No necesito tu diploma, tu experiencia ministerial, toda la teología, yo uso al que está débil, pero que voluntariamente se pone en mi mano.

No te quejes cuando Dios humilla tu orgullo y te da un problema que tú no esperabas. La gracia de Dios no se perfecciona en nuestros diplomas o en nuestra fortaleza, o talento, o elocuencia, sino que se perfecciona en nuestra debilidad.

La Biblia no tiene la palabra problema, pero pruebas si, y las pruebas producen paciencia y Dios está obrando en tus debilidades y dificultades, no por accidentes sino que hay un Dios que no te necesita pero te permite ver su gracia depender de él para que veas cuando le necesitas a él.

3. Dios odia cuando una iglesia tiene por sí este atributo

Mira la famosa iglesia de Laodicea. Apocalipsis 3:14-16 “Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! 16 Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.” Dios dice: No sirves ni como agua fría para refrescar, ni como agua caliente para algo medicinal. Eres tibio. Entre uno y diez, un perfecto cinco espiritualmente eres. Y dices Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.

En el restaurante todo va bien, y la economía después del covid todo está bien para ti, planificaste y te fue muy bien, le has dado a tus hijos lo que nunca tuviste, llegas a la iglesia bien vestido y arreglado pero Dios dice: Eres un miserables porque ya no lees la Biblia más que un texto académico, y tus oraciones son rezos bautistas, lo mismo cada vez, palabras sin corazón y Dios dice:Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas.

Dios no está buscando gente inteligentes, está buscando a los necios de este mundo para enriquecerlos con su sabiduría; no está buscando gente fuerte y noble, sino gente despreciada para hacer de ellos su trofeo de gracia.

Alejandro Magno fue un hombre que antes de los treinta años conquistó el mundo, conocido como el rey de Grecia, pero su pecado le alcanzó y a los treinta y cacho ya estaba muriendo y planificó su funeral, algo nacional en su imperio y su petición era que los mejores médicos de Grecia fueran las personas que cargaran su ataúd y que su ataúd en vez de estar cerrada, estuviera abierta y en todo el camino estuvieran las monedas reales de Alejandro Magno. La gente quiso saber el porqué y salió el secreto. Alejandro Magno quiso que los mejores médicos de Grecia cargaran su ataúd para enseñar que ningún hombre por sabio te puede mantener vivo; sus manos abiertas en el aire para revelar a todos que vas a salir algún día sin dinero en las manos; y el dinero por todo el camino hacia su sepultura para enseñarles a todos que el dinero no puede comprarte ninguna día más de vida.

Cristiano, es tiempo de que de rodillas, con humildad regresemos al Dios que es suficiente y que le busquemos humildemente porque no somos autosuficientes.