Bueno. quizá no les voy a contar cada detalle de nuestro viaje, pero si vamos a tratar de hacer nuestro mejor. (No creo que les interese saber cada vez que disciplinamos a nuestros hijos, o cada vez que tuvimos que parar para ir a ya saben donde.)
Salimos de Tampico a las 6.30 de la mañana con rumbo a Matamoros. En el mapa dice que es un viaje de mas o menos 8 horas. Pero nos hicimos 2.30 horas de Tampico a CD. Victoria, y 4 horas exactas de CD Victoria a Matamoros. Cuando llegamos a Matamoros vimos una ciudad fea fronteriza. Pero entre mas nos adentramos a la ciudad, pudimos ver que la ciudad ha mejorado mucho en apariencia. Paramos en un MC Donalds, pero no comimos ahí. Después fuimos a tres o cuatro farmacias para comprar medicina, que normalmente no se puede comprar en los Estados Unidos. Como Pentrexil y otras cosas mas.
De ahí fuimos a entregar el permiso temporal de nuestra van. El lugar está exactamente antes de cruzar el puente internacional. Hay algo como una caseta. Una baja la ventanilla y le piden los papeles del carro. Después, checan el VIN number del carro para verificar que el carro que estamos regresando es el correcto. Y como después de 3 minutos me dan un comprobante que, aunque ustedes no lo crean, comprueba que ya regresamos el carro. Eso fue todo. Tuvimos el carro dentro del país 4 años. La razón,es que Nicole es Americana, y puede tener el carro por mas de los 6 meses permitidos.
Cuando cruzamos la frontera, (como a las 4.30 pm) a Brownsville, le hablamos al pastor Víctor Álvarez. El nos llevó a comer a un restaurante de comida mexicana que se llama Elvas. Yo me comí una sabrosa carne en salsa roja y Nicole sus favoritas Cheese Enchiladas. Los niños comieron picadillo.
De ahí el pastor nos puso en un hotel. Tiene alberca. Entonces, mañana que tengamos tiempo, nos vamos a echar un merecido chapuzon.
Por la tarde, el Pastor Víctor Álvarez y un servidor, fuimos a una conferencia de Misiones en Merced, TX. Que queda como a unos 45 minutos de Brownsville. Él predicó un tremendo mensaje. Después cenamos ahí mismo. El pastor de esta iglesia nos enseñó sus instalaciones y todo lo que han hecho en solo cinco años. Están construyendo un tremendo auditorio. Después les enseño unas fotos.
Regresé al hotel como a las 10.45 muy cansado. Le llamé a mi estimado suegro. (Ayer le hablé a mi estimada mamá.) Para informarles que llegamos con bien. Esta es la primera vez que nos hacen bajar casi todo del carro en el cruce. No sé por que. Quizá me vieron cara de coreano y no de Mexicano. Pero, bueno. Ya estamos aquí.
Por favor, si alguien me puede enviar el teléfono de Mario.
Gracias y que Dios les bendiga.
Por las almas de Puebla.
Pastor Arturo Muñoz Jr.